Traductor: Lord
Editor: Lord
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Día 26 del Mes de Platino (Hakkin) – Spada
Cinco
días después de salir de la fortaleza de Iskia, Seria finalmente llega a Spada.
No
lleva su habitual uniforme de criada, sino el equipo adecuado para su clase
original, Asesina.
El
traje negro de cuerpo entero que aumenta su capacidad física y le da
resistencia contra todos los elementos está roto, con manchas oscuras en varios
lugares donde su sangre había fluido sobre él. Una muñequera es todo lo que
queda de su guante izquierdo.
Se
ha administrado a sí misma un tratamiento de primeros auxilios, pero eso no
cambia el hecho de que se encuentra en un estado terrible.
Con
una sola mirada, incluso los ciudadanos de Spada que simplemente caminan por
ahí pueden ver claramente que acaba de vivir una batalla; una batalla
extraordinariamente difícil.
Sin
embargo, las pruebas a las que se enfrentó en el camino ya son cosa del pasado,
y acaba de terminar de llevar a cabo las tareas que su señor le había
encomendado.
En
otras palabras, ha realizado una misión de emergencia al gremio de aventureros
y hace un momento ha pedido refuerzos directamente a Su Majestad, el Rey
Leonhart, en el palacio real.
A
partir de ahora, será obra del Rey, que comanda los ejércitos de Spada.
La
misión de Seria como mensajera está completa. El propio Rey ha expresado su
gratitud y le ha pedido que descanse.
Pero
no era una orden, por lo que Seria decide posponer su descanso para llevar a
cabo la ‘petición’ de su amo.
"Ahora
bien, sería bueno que Kurono-sama estuviera en la Academia..."
Seria,
que ha dejado el palacio real todavía vestida con sus ropas de Asesina
manchadas de sangre, adivina dónde podría estar Kurono, la persona que está
buscando.
El
sol hace tiempo que se ha puesto, y el velo de la oscuridad ha descendido sobre
Spada.
Pensándolo
bien, las horas de escuela han terminado, así que Kurono debería estar en el
lugar donde duerme, en los dormitorios de la Academia.
Sin
embargo, no es como si él hubiera prometido estar en los dormitorios; no se puede
decir con certeza que esté allí. Tal vez tenía otras cosas que hacer hoy.
Existe
la posibilidad de que, mientras las mujeres de su equipo no estén presentes,
haya aprovechado la oportunidad para visitar el distrito de luz roja de Spada.
Si
no está en los dormitorios, será imposible encontrarlo en el enorme centro de
la ciudad en una sola noche, incluso para Seria, la sirvienta polivalente capaz
de realizar tareas domésticas, batallas, servicios secretos de inteligencia y
deberes de mensajería.
Preparándose
para el peor de los casos, teniendo que esperar a que Kurono regrese por la
mañana, Seria sigue por el recto camino principal que sale del palacio real.
Pero
mientras da su primer paso, una voz que llama el nombre de 'Kurono', el que
está buscando, resuena.
Inmediatamente
elimina la posibilidad de que haya escuchado mal debido al hecho de que su
nombre se repite, dos, tres veces.
"¿Esto...
viene del Gran Coliseo?"
Ante
ella está la enorme arena circular que es el edificio más famoso de Spada. Aunque
está en medio de la noche, luz viene del edificio.
Los
entusiastas vítores que resuenan desde el Coliseo están gritando
inconfundiblemente el nombre de Kurono.
"Ah,
ya veo. El Carnaval de Maldiciones, ¿no?"
En
lugar de estar sorprendida, la comprensión y la emoción afloran primero a su
mente.
Ella
ya sabe que a Kurono le gusta usar armas malditas. También sabe que su poder es
lo suficientemente fuerte como para encarar de frente a un monstruo de Rango 5.
Siendo
así, no estaría nada fuera de lugar para Kurono participar en el Carnaval de
Maldiciones, ni es inesperado que lo esté haciendo bien.
“Kurono-sama
es una persona que generalmente destaca, después de todo.”
Susurrando
esto, Seria corre como el viento, dirigiéndose directamente al animado Gran
Coliseo.
***
Lily
y Fiona han completado finalmente su viaje de cuatro días de regreso a Spada.
Como
era de esperar de una gran ciudad, sus grandes puertas principales siguen
abiertas a pesar de estar en medio de la noche, con gente yendo y viniendo.
Las
dos pasan fácilmente a través de las puertas bien iluminadas con un destello de
sus Tarjetas de Gremio.
No
tiene sentido seguir disfrazándose; volvieron a sus apariencias originales
después de pasar por el Pueblo Dakia.
Ya
no son hermanas peregrinas; ahora son una bruja y una Hada, miembros del equipo
de Rango 3, [Element Masters]... las identidades exactas grabadas en sus Tarjetas
de Gremio.
Y
así, entran en la ciudad de Spada por primera vez en dos semanas.
"Entonces,
¿vamos a los dormitorios ahora mismo?"
"¡Sííí~
Kurono~!"
Con
su reencuentro emocional finalmente a su alcance, los dos están en completo
ánimo.
En
medio de la carretera principal, que todavía está llena de gente, Fiona levanta
el látigo para golpear a Marie con todas sus fuerzas, totalmente decidida a
proceder a la máxima velocidad. Lily no la detiene; de hecho, está animando a
Fiona.
Si
no tienen cuidado, serán arrestadas por conducción temeraria, pero ya han
pasado el estado en el que son capaces de mostrar preocupación por tales
asuntos. Han superado sus límites de ser capaces de contenerse.
Y
cuando están a punto de empezar a moverse a una velocidad similar a la de un
cohete.
"¡Hey,
eso es peligroso!"
"¡Idiotas!
¡Qué tan rápido creen que van!"
Las
voces de los ciudadanos enojados de Spada se alzan frente a ellos.
"Cielos,
pensar que alguien haría que su caballo corriera a toda velocidad en un camino
tan lleno de gente. Supongo que hay gente problemática como esa ahí fuera,
después de todo."
"Los
hay, ¿no?"
Ignorando
su intención original de hacer exactamente lo mismo, Lily y Fiona hacen
comentarios secos sobre esta persona imprudente.
La
carretera principal está dividida en una carretera para carruajes y similares y
un sendero para peatones, pero por la noche, el tráfico está formado casi en su
totalidad por personas a pie.
Por
lo tanto, un caballo o carruaje que se mueva a toda velocidad crearía una
situación como ésta, en la que apenas consiguen evitar una colisión.
Lily
y Fiona no están lo suficientemente interesadas como para tratar de ver la cara
de esta persona imprudente que está en una gran prisa o simplemente un tonto.
Parece que su destino son las grandes puertas principales detrás de Lily y
Fiona.
El
cuerpo negro de un caballo emerge de entre la multitud, de alguna manera sin
atropellar ni a un solo peatón, ya sea a través de una increíble técnica de
manejo de caballos o por pura suerte.
Pero
al acercarse, Lily y Fiona miran en su dirección.
El
caballo, moviéndose como una ráfaga de viento negro, pasa a varios metros de su
lado. Cuando sus caminos se cruzan...
"Vamos
a atravesar las puertas principales con un movimiento, ¡agárrate fuerte,
Nell!"
"¡Sí,
Kurono-kun!"
Las
dos oyen esa voz inconfundible, la figura del que espolea al gran caballo
negro.
"¿Eh...?"
"...
¿Kurono?"
La
ropa negra revoloteando, el pelo negro y un ojo carmesí brillante.
Normalmente,
ambas estarían encantadas con este inesperado encuentro con Kurono, pero lo que
sienten en su lugar es un hirviente malestar en los fondos de sus estómagos.
"¿Quién
podría ser esa mujer?"
"¿Quién
es esa mujer?"
Cuando
las dos confirmaron que la persona que vieron era Kurono, la vieron a ella.
Incluso si no querían verla, lo hicieron. Desafortunadamente, la han visto.
La
mujer se aferraba a la robusta espalda de Kurono con una expresión embrujada y
feliz.
La
princesa ideal de todo el mundo, con su aspecto dulce y ordenado y un par de
alas de color blanco puro que sobresalen de su espalda.
"Después
de todo, no deberíamos haber dejado el lado de Kurono por tanto tiempo."
Sí,
eso fue...
"Mira,
había un insecto indeseable pegado a él."
Una
enemiga.
Una
enemiga, aún más imperdonable que los Cruzados o los Apóstoles.
Pero
simplemente matarla no resolvería el problema. Ella es la clase de enemiga más
difícil de este mundo... una rival romántica.
"Sí,
tienes razón."
Como
si reflejaran las emociones negras y turbias que se arremolinan dentro de sus
corazones, la luz en sus ojos comienza a oscurecerse.
Sus
sentimientos de incomodidad ya se han convertido en desagradables sentimientos
de odio.
Sólo
la vieron, a Nell Julius Elroad, por un momento. Pero esa imagen de ella está
quemada en sus ojos.
Nell,
que envolvía sus brazos alrededor de la cintura de Kurono como si lo abrazara,
y presionaba su gran pecho contra la espalda de Kurono con una mirada encantada
en sus ojos.
Esa
no era la mirada pura de una princesa, sino la de una mujer vulgar con deseo sexual.
"...
Ella es mi enemiga, ¿no?"
El
día de su cita con Kurono, el inolvidable día 13 del Mes de la Llama Roja
(Kouen), Fiona se había sentado en ese mismo lugar.
Pero
no hay manera de que ella pueda darse cuenta de eso en ese momento, ella tenía
exactamente la misma expresión que Nell llevaba puesta.
"...
Fiona."
Cuando
el enojo de Fiona estaba llegando al punto en que su visión estaba a punto de
volverse completamente roja de rabia, Lily dijo su nombre con voz fría.
"Sí,
lo sé, Lily-san."
Fiona
está tranquila sólo por fuera mientras tira de las riendas, sabiendo lo que hay
que hacer a continuación.
El
cuerpo de Marie se estremece, como si pudiera sentir el peligroso aura que
flota de su amo. Y luego se da la vuelta apresuradamente, como si su vida
dependiera de ello.
Con
un giro de 180 grados, se alejan del palacio real de Spada que se asoma en la
distancia para encararse a las grandes puertas principales que acaban de
atravesar.
"¡Ve
tras Kurono, ahora mismo!"
