15 nov 2018

Kuro No Maou Cap 404

Autor: Hishi Kage Dairi

Traductor: Lord

Editor: Lord



404 Regla de la Mayoría

[Wing Road] regresó a Spada, el paisaje de la ciudad ahora teñida de blanco en la nieve del invierno, en la tarde del día 6 de la Penumbra. Se habían apresurado a ir al Pueblo Asbel debido a la urgencia de su misión, pero su viaje de regreso fue un viaje de ocio.

El fenrir contra el que habían luchado había estado bajo la influencia de una poderosa maldición, pero ciertamente fue un enemigo fuerte. Aunque puede parecer que, gracias a su esfuerzo individual y a su diligente preparación, lo habían derrotado fácilmente, seguía siendo un adversario al que habrían tenido que enfrentarse a la aniquilación si hubiesen dado un solo paso en falso. Todos los miembros de [Wing Road] entendían que, si hubieran luchado contra ese mismo fenrir pero liberado de la maldición que lo hizo enloquecer y limitado su verdadera inteligencia, el grado de peligro se dispararía instantáneamente.

Es por eso que todos ellos sintieron que se merecían un viaje de regreso tranquilo. Bueno, todos excepto Nell, que preferiría no perder tanto tiempo.

Cruzados… Recuerdo que Kurono-kun mencionó eso.


Nell recordó lo que había pasado en medio de su conversación posterior a la misión con Kurono. Había pasado tanto tiempo desde que tuvo la oportunidad de hablar a solas con su querido Kurono… pero ella tuvo que interferir una vez más. Ese hada malvada.

Nell había estado furiosa instantáneamente con Lily, como resultado de las muchas transgresiones de la hada hasta ahora, pero se las arregló para notar rápidamente la cresta real de Spada sellaba en el sobre entregado a Kurono. Por supuesto, no había mirado su contenido, y tampoco preguntó sobre él, pero era obvio por la forma en que Kurono se había endurecido por completo al leerlo, que lo que contenía esa carta era un asunto de máxima urgencia.

«"Lo siento Nell, tengo que irme. Nos vemos."» ‒ Había dicho simplemente antes de correr como si su vida dependiera de ello. Nell no tuvo la oportunidad de preguntar qué había pasado, ni de despedirse de él.

Fue una despedida tan abrupta. No existía ningún tonto tan grosero como para despedirse de la princesa de Avalon con tan poca ceremonia. Y el primero que lo hizo resultó ser el hombre que la princesa deseaba tanto. Nell lloraría hasta quedarse dormida por lo menos 3 noches después de la conmoción y la angustia, es decir, si siguiera siendo la misma chica frágil que había sido después de la batalla de Iskia.

Kurono-kun no me despidió así porque no le gusto. Algo muy serio debe haber pasado para que se comportara así... ¿cierto?

La actual Nell tenía la fuerza mental para no malinterpretar las acciones de Kurono. Y sobre esa base, ella había supuesto que Kurono la necesitaría, seguramente.

Sólo puedo enseñarle magia modelo, por ahora… pero ayudaré más, ¡juro ayudar a Kurono-kun en todo lo que pueda!

Con esa determinación, Nell había estado, durante el mes pasado, participando en una misión de Rango 5 tras otra, desafiándose feroz e implacablemente a sí misma a nuevas alturas, todo para recibir una protección divina propia.

No era la misma Nell débil que había sido. Ella no se quedaría postrada en cama por una mirada maliciosa de Lily. Era más fuerte, mucho más fuerte.

Porque sé que también le gusto a Kurono-kun.

En esa noche de tormenta, Kurono había recurrido a colarse en los dormitorios de las chicas solo para verla. Le había dado las gracias por sanarlo después del [Carnaval de Maldiciones] y por toda su ayuda en Iskia. Había pedido que ella le enseñara magia. Nell era la única en la que podía confiar… él lo había dicho muy claramente.

Kurono-kun me quiere. No hay mejor motivación para perfeccionarme que esa.

Aceptó el hecho de que había sido perezosa. Se dejó ahogar en la completa dicha de estar con Kurono, solo ellos dos. Había sido demasiado ingenua pensando que podría quedarse en el paraíso para siempre. Que es exactamente la razón por la que se había encontrado con una secuela tan trágica cuando la hada había llegado, realmente desde un punto ciego, y le había asestado un golpe tan devastador a su psique.

Pero pudo volver a ponerse de pie, todo gracias a Kurono. No tenía tiempo para perderlo en la desesperación. Kurono la necesitaba, y ella haría todo lo posible por responder a su sincero deseo de ayuda. Ella se esforzaría. Se volvería fuerte.

Y entonces, seguramente, me convertiré en la única y exclusiva de Kurono-kun...

Nell estaba finalmente en la línea de salida en la carrera hacia el corazón de Kurono. Ya no desearía unilateralmente su amor sin dar nada a cambio. Ya no sería un pajarito llorando para que su padre le trajera comida.

No, se convertiría en la cazadora que atrapa a su propia presa. Como un águila feroz, seguro que capturaría el afecto de Kurono. Lo juró sobre las alas blancas de su espalda, sobre la línea de sangre heredada de los gobernantes supremos del cielo.

"… Esta misión de emergencia, ¿qué quieren hacer?" ‒ Dijo Nero con su imperturbable voz… No, su tono parecía un poco más serio de lo habitual, lo que despertó a Nell de su ensueño con las aves de presa.

Fue al día siguiente de su regreso a Spada, el día 7 de la Penumbra. Los miembros de [Wing Road] estaban reunidos donde solían hacerlo, en el comedor principal de la academia. Los cuatro, ya que Charl no estaba presente, estaban sentados en una mesa y disfrutando del sabor especial de la comida de la cafetería que no habían probado durante su viaje de varias semanas.

"¡La tomaremos, eso es lo que hay!" ‒ Aulló Kai. ‒ "¡¡No importa si es el Rey Dragón o quienquiera que sean estos Cruzados, están trayendo la pelea a Spada, y yo digo que se la demos bien!!".

Era mediodía. Las hordas de estudiantes hambrientos habían llenado el comedor y habían estado devorando su comida. A nadie parecía importarle la bulliciosa declaración de Kai, que seguramente viajó a cada rincón de la gran y concurrida sala. O al menos, ningún Spadiano podría quejarse.

En cada mesa había un volante que detallaba el llamado personal del Rey Leonhart a los aventureros de Spada. En otras palabras, era el formulario de la misión de emergencia para unirse al 4º regimiento, Gladiador. Todos sabían lo que eso significaba para su nación.

Pero por otra parte, saber lo que significaba, y realmente participar eran asuntos totalmente diferentes.

"¿Podrías no ser estúpido por una vez? Piensa en nuestra posición antes de empezar a gritar por la guerra". ‒ La voz fría de Safiel derribó rápidamente el valiente rugido de Kai. Espera, ¿acaso alguna vez Safiel habló cariñosamente a Kai, o a alguien más? Los demás reflexionaron.

"Puede que sea una misión legítima y todo eso, pero estamos hablando de guerra". ‒dijo Nero.

Un aventurero ordinario sería libre de participar y servir como soldado en el frente de guerra. Pero, ¿se aplicaba una lógica similar a los aventureros de nacimiento noble? ¿Qué interés tendría esta guerra para la realeza extranjera que por casualidad está de aventuras?

"Generalmente nos dejan tranquilos" ‒ dijo Nero con un suspiro ‒ "pero hay muchas posibilidades de que Nell y yo volvamos a Avalon…"

Nero y Nell eran los dos aventureros de Rango 5 que merecían ese título. Sus diversas hazañas, junto con sus compañeros de confianza, los hicieron ser reconocidos como individuos poderosos. No eran tratados de forma especial sólo porque pertenecían a la realeza de Avalon.

Como el primer príncipe y primera princesa de una nación, Nero y Nell tenían la obligación de regresar a su capital con premura después de que estallara cualquier guerra.

Y sin embargo, entendiendo ese hecho mejor que nadie, Nell se atrevió a negarlo con palabras claras.

"No, onii-sama, me temo que no puedo hacer eso."

"Oye, Nell, ¿cuál es la gran idea..."

Sería una idiota si dejara pasar esta oportunidad. Añadiría ella si olvidara sus modales de princesa.

Spada yendo a la guerra, el misterioso enemigo conocido como los Cruzados, un enemigo hacia el que Kurono tenía un profundo odio. Nell había conectado todos los puntos en el momento en que vio el formulario de la misión.

Estos Cruzados son enemigos de Kurono-kun.

Kurono los había mencionado indirectamente. Que tenía enemigos a los que tenía que matar sin importar lo que pasara. Y ahora el enemigo fue expuesto ante ella.

También había destellos de la memoria que ella había visto dentro de él. La tragedia total, la aldea en llamas, los restos carbonizados, crucificados y masacrados de amigos… Nell entendía exactamente como se sentía Kurono. Las emociones que sintió en esas escenas, y las emociones que aún están dentro de él.

Él había sufrido una tristeza profunda, desesperada e insoportable. Y de esa injusticia, de esa ira, surgió un oscuro rencor. Nunca lo demostraba en su vida diaria, pero el deseo de venganza dentro de él no había desaparecido, ni mucho menos. Sólo había estado agudizándose, incubando en lo más profundo de su alma, esperando pacientemente su liberación.

Ella le ayudaría a cumplir su venganza. Ella sería la primera, la única, justo a su lado. Eso fue algo que ella juró en la cama junto con él en la enfermería del Gran Coliseo.

Esto servirá como mi oportunidad de salir adelante. Lo haré mío sin importar lo que cueste.

Se mojó los labios mentalmente al pensarlo, mientras presentaba su cara de princesa pura e inocente en la mesa mientras cortaba a Nero para decir…

"Yo también quiero pelear. Quiero proteger a Spada." ‒ Lo que de por sí no era mentira. Kurono quería proteger a Spada y ella también. Y después de sus valientes esfuerzos en el campo de batalla, esta vez, ella sería la que montara detrás de él en su Nightmare mientras ellos cabalgaran en el desfile de la victoria. Necesitaba un lugar para celebrar después de todo.

"Haah..." ‒ Nero suspiró con una cara que sugería que después de todo sabía cómo era su hermanita ‒ "supongo que debería haber esperado algo así de ti…".

Él también habría tenido razón en sus suposiciones, si sólo hubieran sido tres meses antes, antes de que Nell conociera a Kurono, en un momento en que ella amaba y respetaba a su hermano con todo su corazón.

"Por favor, onii-sama. Ni siquiera tú soportas la posibilidad de huir, ¿verdad?" ‒ Esta vez, era el turno de la hermana de mostrar su comprensión de la personalidad de su hermano.

Puede que Nero no tuviera mucho apego a su posición como realeza, pero su sentido personal de orgullo era alto. No era un orgullo nacido de la fama y la fortuna, sino uno que valoraba la libertad por encima de todo lo demás. Era una de las virtudes que hicieron de Nero quien era.

Y Nell respetaba eso de él, realmente lo hacía. Así que ella estaba contenta de usar ese conocimiento para persuadirlo con las palabras más adecuadas para convencerlo.

"No te equivocas. No me asustan los Cruzados o como se llamen, pero esta vez tendré que decir que no". ‒ Nero lo negó claramente, lo que Nell tomó con calma, ya que sabía que su hermano no se convencería tan fácilmente. Lo que sólo podía significar que Nero había priorizado algo por encima de su terco orgullo. Y Nell sabía muy bien lo que era ese algo.

"¿Puede que sigas sin confiar en mi fuerza?" ‒ Ella suplicó.

"Escucha Nell, incluso si fueras más fuerte que yo, tomaría la misma decisión. Como tu hermano." ‒ Nero reveló claramente sus motivos. En momentos como éste, su hermano nunca se anda con rodeos ni trata de desviar el tema.

Esta faceta de su personalidad en la que siempre era directo e iba al punto en los momentos importantes era ciertamente admirable, tenía que admitirlo. Pero para su objetivo actual, estaba empezando a ser un fastidio.

Tal vez debería irme por mi cuenta…

No, todavía no, no debería sacar conclusiones rápidas, deliberó Nell. Calmó su irritación antes de que un ceño fruncido pudiera aparecer en su cara. Pensando con claridad, entendió que era mejor aprovechar todo el potencial de [Wing Road] si lo estaba haciendo en serio.

Nell quería ayudar a Kurono, ayudarlo a matar a sus enemigos. Pero más que eso, ella quería protegerlo y garantizar que sobreviviera a la guerra. ¿En qué la ayudaría si él muriera? Eso era poner el carro ante el caballo, y sabiendo como luchaba Kurono, se imaginaba que los riesgos eran especialmente altos para él. Ella expresó su determinación:

"Onii-sama, me doy cuenta de que te importo, pero mi opinión sobre el asunto permanece."

"Esto no lleva a ninguna parte." ‒ Safiel habló para cortar a Nero que estaba a punto de intentar convencer a su hermana una vez más. ‒ "[Wing Road] resuelve los argumentos relacionados con la misión por mayoría de votos. Todos estamos de acuerdo en esto, ¿correcto?"

Fue algo que decidieron cuando formaron su equipo por primera vez. Nadie necesitaba un recordatorio. Incluso Kai entendía la regla más básica de su equipo. Safiel había hecho la pregunta simplemente por cortesía.

"Tenemos tres opciones: a favor, en contra y abstención."

Podrían elegir debatir su punto de vista o presentar mejores argumentos, pero al final, las opciones siguieron siendo 3. Una vez más, Safiel sólo lo confirmó por cortesía.

"¡Por favor, espera, Safi-san! No puedo..."

"No, Nell." ‒ dijo Nero. ‒ "Esa es nuestra regla. No te quejes de algo que acordaste".

[Wing Road] se estableció sobre la base de la libertad. Todos los miembros estuvieron de acuerdo en que no querían que ninguna regla o razón restrictiva fuera formal entre ellos. Sólo tenían dos reglas muy básicas: dividir las recompensas en partes iguales y resolver los desacuerdos por mayoría de votos.

Cada miembro tenía un voto, por lo que todos tenían el mismo peso a la hora de tomar la decisión. El sistema era el más simple, pero la mayoría de los equipos nunca lo utilizaban.

Nero siempre había acatado fielmente esta regla, ya que no sólo creía en la libertad, sino también en la igualdad. Por eso, ya sea el intelectualmente cuestionado Kai o la astuta genio Safiel, ambos recibieron un voto. No era como si su equipo estuviera libre de disputas, sólo que aún no se habían disuelto sin importar el resultado de la votación.

Esto se debe a que cada uno de los 5 miembros de [Wing Road] se sometió a su regla de igualdad tan firmemente como Nero. Por lo tanto, nadie aceptaría una excepción.

"Adelante, Safi." ‒ Nero instó, y la nigromante amatista empujó hacia arriba sus gafas de sellado en una muestra de reconocimiento.

"Si es una división de 2-2 con una persona absteniéndose," ‒ continuó Safiel ‒ "la prioridad es…"

"… ¡Cuenten conmigo! [Wing Road] protegerá la paz de Spada" ‒ gritó una voz, esta mucho más fuerte que la de Kai. Tan alto que uno podría imaginar que todo el edificio la oyó.

Todos los estudiantes y profesores estaban bien familiarizados con esta voz en particular que sonó en sus oídos. Los otros 4 miembros de [Wing Road] especialmente. No confundirían a esa soprano molesta con nadie más. Eso era simplemente imposible.

Todos ellos se volvieron hacia el ruido, y como era de esperar, esa pequeña chica con colas gemelas rojas y una capa que ondeaba con orgullo, su amiga, estaba allí como una campeona. Y allí de pie, dio a conocer su opinión:

"¡¡¡Ahhhh hah hah hah haa!!! ¡El Rayo Carmesí de Spada, Charlotte Tristan Spada, ha vuelto!"


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Delirios de Lord:
Oh, vaya determinación.
Pero creo que aspirar a ser la única y exclusiva, pues, es mucho jaja.