Traductor: Lord
Editor: Lord
02
Regreso a la Aldea
"De
acuerdo, los llevaré de vuelta al pueblo mientras terminamos los registros, así
que todos en fila."
Los
registros de esclavos iban bien. Llevé a los esclavos de vuelta a la aldea en
grupos usando mi habilidad de portal a medida que se iban completando. Por
supuesto, tuvimos que esperar a que el enfriamiento expirara cada vez, así que
nos sentamos a dar muchas vueltas.
"Es
una pena que no tengas una habilidad conveniente para teletransportarte,
Raphtalia."
"Podría
usar el Pergamino de Retorno".
"Sí,
pero no serviría de mucho enviar gente al reloj de arena del dragón. Aunque,
supongo que podría hacer que Firo los recogiera y los llevara a la aldea desde
allí".
Sin
embargo, tenía un tiempo de enfriamiento similar. Lo mismo ocurría con el
Retorno de la Vena del Dragón de Kizuna. Eso me recordó… Supongo que Raphtalia
también podría usar el Retorno de la Vena del Dragón.
"Por
cierto, me pregunto adónde habrá ido ese héroe de las siete estrellas que se
supone que está en Zeltoble" ‒ murmuré.
Me
imaginé que reunirme con el héroe de las siete estrellas de Zeltoble no sería
un problema si la reina, el comerciante de accesorios y los traficantes de
esclavos me apoyaban. Pero el héroe se había ido a alguna parte y estaba fuera
del país. Buscar al héroe era demasiado difícil, así que le enviaron un mensaje
de mi parte pidiéndole que volviera. No estaba seguro si el héroe había sido
llamado de otro mundo o si era alguien escogido de este mundo, pero obviamente
este héroe no apreciaba mucho a los héroes santos. Por otra parte, gracias a
esos otros tres idiotas, la gente había llegado a la conclusión de que yo era
el único que no era una completa farsa o simplemente mercancía dañada.
"Aun
así, al menos tenemos que atarte al reloj de arena para que puedas usar el
Retorno de la Vena del Dragón."
"Sí.
Pero hubiera sido bueno si hubiéramos podido encontrarnos y hablar con el héroe
también, por el bien del mundo."
"Sí."
Hablar
con los héroes de las siete estrellas para aprender sobre sus métodos de mejoramiento
aumentaría mis propias estadísticas, y nada más. Al menos, eso es lo que
esperaba que pasara.
"Ey,
pequeño Naofumi. Tenemos tiempo libre, así que, ¿qué tal si tú y yo…?"
"Escudo
Portal".
No
tenía ganas de tratar con Sadina, así que seguí adelante y la envié de vuelta a
la aldea antes del siguiente grupo de esclavos. Su coqueteo se le estaba yendo
de las manos y yo no tenía la energía para soportarlo ahora mismo.
"Nunca
sé si está hablando en serio o si está bromeando" ‒ dije.
"Sadina
nunca parece ser demasiado seria en nada" ‒ respondió Raphtalia.
"Sí,
lo sé. No tienes ningún interés en perseguir asuntos románticos antes de que
este mundo sea pacífico, ¿verdad, Raphtalia?"
"Ci…
cierto"
Seguimos
charlando mientras enviábamos a la gente de vuelta con mi portal cada vez que
el enfriamiento expiraba.
***
Y
entonces, finalmente, llegó el momento de enviar a Fohl y a Atlas de vuelta.
Atlas todavía se estaba recuperando, pero Fohl la trajo y la puso cerca de
donde todos estábamos esperando. Después de situarla, le trajo una jarra de
agua.
"Gracias,
hermano".
"No
te preocupes. ¿Te sientes bien?"
"Sí.
Me siento muy cómoda."
"Eso
es bueno."
"Sr.
Naofumi… ¿Cuándo nos vamos?"
Atlas
se volvió en mi dirección cuando se dirigió a mí.
"Es
casi la hora."
"Entendido".
"Probablemente
deberíamos continuar y darte una dosis más de medicina."
Cambié
mi escudo por el Escudo del Árbol Sagrado de la Tortuga Espiritual y le di a
Atlas otra dosis del Elixir de Yggdrasil restante. Ya había mejorado mucho,
pero su condición pareció mejorar aún más.
"Gracias."
"No
hay problema."
Le
di a Fohl una mirada condescendiente.
"Gununu…"
‒ refunfuñó. (NT: Típica onomatopeya japonesa de que está molesto)
Hmm…
¿Fui sólo yo o hubo algo sobre la forma en que dijo eso que sonó como alguien
más? Lo que sea. Él iba a tener que trabajar duro para pagar esta medicina. Se
suponía que tenía un gran potencial, así que no iba a ser suave con él. Lo
haría trabajar como… un esclavo.
"Sr.
Naofumi…"
Atlas
agarró mi mano con la suya.
"Por
favor, trate de llevarse bien con mi hermano."
"¡Nos
llevamos bien! ¡¿Cierto?!"
Fohl
puso su brazo alrededor de mi hombro como si fuéramos buenos amigos. ¿Qué pasa
con esa actitud? No podía dejar que se hiciera una idea equivocada de nuestra
relación.
"Tú
también, hermano. Este hombre es una persona extraordinaria".
"¡Ya…
ya lo sé!"
"Me
alegra oír eso."
Atlas
parecía exhausta. Volvió a su posición de descanso. La medicina estaba
funcionando, pero estaba claro que seguía enferma. Tenía sentido que estuviera
exhausta.
"Tengo
un poco de sueño."
"El
viaje de vuelta a la aldea terminará en un instante. Entonces podrás descansar cuanto
gustes".
"¡Todos
nos iremos en flluuuushhh y luego estaremos allí! Prefiero correr, pero esto
también es divertido, así que estoy segura de que te gustará".
Como
siempre, Firo era terrible para explicar las cosas, pero supongo que esa era su
manera de describir mi habilidad de portal.
"El
pájaro que tira de los carruajes está lleno de energía y… siento un poder puro
e incontaminado dentro de ella. Este pájaro… Su fuerza rivaliza incluso con la
suya, ¿no es así, Sr. Naofumi?"
Atlas
señaló en la dirección de Firo. Impresionante. Su descripción de Firo fue
acertada. Puede que fuera ciega, pero estaba claro que seguía sintiendo lo que
la rodeaba de alguna manera.
"¿Qué
pasa, Amo?"
"Esta
nueva esclava que acabo de comprar -Atlas- es ciega, pero dice que todavía
puede decir que eres fuerte."
"Tee
hee hee. ¡Recibí un cumplido!"
"Está
claro que no escatimó ninguna amabilidad en criarla, Sr. Naofumi."
"¡Síp!"
Firo
hinchó las plumas de su pecho con orgullo cuando respondió. ¿Amabilidad? ¿Ser
amable con Firo? ¿De qué estaba hablando esta chica?
Y
entonces llegó el momento.
"Vale,
el enfriamiento de mi portal ha caducado. Ya es hora de que regresemos".
"Entendido.
Por fin podemos regresar" ‒ dijo Raphtalia.
"Sí.
Dicho esto, voy a hacer que los traficantes de esclavos continúen buscando
esclavos de Lurolona, así que probablemente terminaremos volviendo a Zeltoble
de vez en cuando".
"Los
precios han dejado de subir, pero los esclavos… que dicen ser de Lurolona
siguen siendo vendidos a precios altos, después de todo."
Me
gustaba pensar que habíamos recuperado la gran mayoría de ellos, pero no podía
decir con certeza que no quedaba ninguno. Por eso seguíamos buscando. No era
muy probable, pero siempre era posible que unos pocos hubieran escapado de la
esclavitud para convertirse en mercenarios o algo así. Podría haber otros
esclavos que Sadina no había podido adquirir. Nunca imaginé que sería tan
difícil asegurarse de que no quedara ninguno.
"Escudo
Portal".
Usé
mi habilidad para teletransportarnos de vuelta a la aldea. Reconocí el olor de
la aldea al instante. Olía como el mar. Después de todo, era en parte un pueblo
de pescadores.
"Así
que esta… es la aldea del Sr. Naofumi."
A
pesar de ser ciega, Atlas miró a su alrededor.
"¿Puedes
ver ahora?" ‒ Le pregunté.
"No.
Pero puedo sentir cosas…"
Sentir
cosas, ¿eh? Era impresionante lo poco que parecía estar inhibida por su
ceguera.
"De
todos modos, sigues enferma. Haremos que te quedes en la enfermería del pueblo.
Fohl, llévala a ese edificio de allí".
Señalé
el edificio que estábamos usando para la enfermería. Lo construimos para tener
un lugar donde curar las heridas de los esclavos.
"Lo…
lo tengo."
Fohl
puso a Atlas sobre su espalda y comenzó a alejarse.
"Me
gustaría hablar con usted de nuevo, Sr. Naofumi."
"Iré
a verte más tarde, así que descansa por ahora."
"Entendido.
Vamos, hermano."
"De
acuerdo".
Fohl
miró nerviosamente a su alrededor mientras caminaba hacia el edificio con Atlas
a sus espaldas.
***
"¡Oh!
¡Imiya!"
"¡Tío!
¡Y todos los demás también!"
Imiya
abrazó a su tío, claramente feliz de reunirse con su familia. Me enteré de que
sus padres habían sido asesinados, así que fue bueno que se reuniera con su
tío.
Parecía
que los nuevos esclavos ya habían comenzado a reavivar viejas amistades por su
cuenta. Acabábamos de empezar una pequeña fiesta en el pueblo para dar la
bienvenida a los nuevos esclavos. Decidí recibirlos a todos con algo de mi
cocina para darles un poco de motivación extra. Antes de darme cuenta, el día
había terminado.
***
Al
día siguiente empezamos a entrenar a los nuevos esclavos y monstruos. Durante
los primeros días, sólo hicimos una cantidad mínima de nivelación mientras se
acostumbraban a la aldea. Puse a Keel, Rishia y Raphtalia a cargo de los nuevos
esclavos, y los mantenían a todos ocupados con varias tareas. Sadina también
estaba ayudando a subirlos de nivel. A pesar de lo que sentía por ella a veces,
seguía siendo ridículamente fuerte después de todo. Había oído que su grupo
había sido atacado una vez por un grupo de monstruos y Sadina los había
aniquilado rápidamente con un ataque mágico.
Y
así pasaron dos días desde nuestro regreso.
Delirios de Lord:
¿Cierto?... ¿Y tú respondes eso Raphtalia? En serio...
Ese era el momento para aclarar el mal entendido carajo