Traductor: Lord
Editor: Lord
11
Aura de Sacrificio
Raphtalia,
Firo, Rishia, Raph-chan y yo fuimos los únicos que quedamos.
Yomogi
había sido registrada en el equipo de Kizuna, así que había sido convocada a la
ola junto con Kizuna.
¡Maldita
sea! ¡Él planeó separarnos todo el tiempo!
Un
ruido sordo resonó en lo más recóndito de mi mente, lo que me hizo pensar que
esta ola estaba ocurriendo en el mundo anterior.
"Espero
que estés contento, usé este libro para evitar que tu escudo te succione a la
ola. ¿Hm? ¿El poseedor de la katana de las armas vasallas no tiene nada que
decir? Supongo que está atada a un idiota de otro mundo, después de todo".
Así
que incluso podía detener el teletransporte automático que me había atado a las
olas desde que me encontré en Melromarc.
Al
menos todavía tenía a los miembros de mi equipo: Firo, Raphtalia, Rishia y
Raph-chan. Eso fue mejor que nada.
Kizuna
y los otros deben encontrarse frente a la ola ahora mismo.
"¡Ahaha!
¡Ahora tengo al estúpido Héroe del Escudo para jugar! ¡Esto será
divertido!" ‒ Kyo se rió. Actuaba como si todo fuera como él quería, pero
el campo gravitatorio de la habitación se había debilitado notablemente.
Las
estadísticas llenaron lentamente mi campo de visión.
¿Nivel
76+75?
L
'Arc había dicho algo una vez acerca de ganar los niveles totales de ambos
mundos.
¿Esa
fue la razón por la que podía permanecer de pie en el campo de gravedad de Kyo?
Desafortunadamente,
el efecto parecía funcionar también en Kyo. Y tenía esos ataques basados en
estadísticas. Tenían la debilidad de no ser capaces de dar un golpe mortal,
pero seguían siendo una seria amenaza.
Y
no teníamos a Kizuna cerca para ayudar.
No
tuvimos más remedio que continuar la batalla en estas nuevas condiciones, pero
no me gustó cómo se veían las cosas.
Al
menos podría usar todos los escudos que gané en los dos mundos.
Pero,
todavía tenía el Escudo Corazón de la Tortuga Espiritual equipado, con páginas
del libro de Kyo pegadas por todas partes, así que no pude cambiarlo por nada
más.
A
juzgar por lo que dijo, creo que yo era el objetivo de su nuevo plan. Quizás
había preparado esto para que pudiese bloquear cualquiera de mis habilidades
que hiciese uso de la energía de la Tortuga Espiritual. Entonces, cuando
perdiera, tendría el cien por cien de la energía de la Tortuga Espiritual a su
disposición.
Él
había invocado artificialmente una ola para poder tener en sus manos la energía
restante de la Tortuga Espiritual.
¿Qué
se supone que tenía que hacer? ¿Cómo podría luchar en circunstancias como
estas?
Tampoco
podía usar Escudo Portal; las copias de las cuatro bestias sagradas que
deambulaban por el terreno hacían inaccesible esa habilidad.
Tendríamos
que encontrar alguna forma de derrotarlo por nuestra cuenta.
"¡Ahahaha!
¡Mira qué bien me sienta!"
La
habitación estaba llena de energía de Tortuga Espiritual. Giró en espiral
alrededor y hacia Kyo.
"¡Ja!
¡Toma esto!"
Familiares
de la Tortuga Espiritual (tipo neo-guardián) se pusieron de pie y vinieron tras
nosotros. Tenían armas que se parecían a las armas sagradas que tenían los
otros tres héroes en el mundo anterior.
Esta
pelea estaba empezando a parecerse mucho a la última, cuando nos encontramos en
la cámara central de la Tortuga Espiritual.
...
Excepto que ahora había menos gente de mi lado.
"Raphtalia,
¿estás lista?"
"Sí."
"¡Yo
también estoy lista, amo!"
No
me había dirigido a ella, pero Firo estaba en forma humana ahora, de pie y
lista para la batalla.
Estaba
vestida en pijama, pero podía ver las Garras de Perro Karma sobresaliendo de
sus pies. Supongo que ese era el efecto de Arma Oculta.
Al
menos yo no estaba solo. Es hora de ver qué podemos hacer.
Las
páginas atascadas por todo mi escudo me estaban drenando de energía de alguna
manera. Se sentía horrible. No podía seguir usando el Escudo Corazón de la
Tortuga Espiritual por mucho más tiempo.
"¡Uh-oh!
¿Has empezado a darte cuenta? ¡Así es, tomaré toda la energía que tengas en ese
escudo tuyo! Para conseguir la última gota, ¡tendré que matarte primero! Es una
cosa protectora, sabes, por eso necesitaba que la ola se abriera."
Así
que todo esto había sido parte del plan de Kyo. Obtener la energía que aún
tenía almacenada en mi escudo. Para llegar a él tuvo que convocar una ola. Si
los cuatro héroes santos existían para proteger al mundo de las olas, entonces
debe haber encontrado una manera de romper las reglas invocando
intencionadamente una ola. Los héroes eran parte de la protección, como las
bestias. Él había encontrado una forma de evitarlo, y ahora su plan estaba en
marcha.
Con
la ola ocurriendo en el otro mundo, la energía en mi escudo podría ser
convocada de vuelta al sitio de la ola, y esa fue su oportunidad de tomarla.
Ese
era un buen plan. ¿Cómo se le ocurrió?
El
escudo más fuerte que tenía en ese momento era el Escudo del Dragón Demoniaco.
El mundo en el que estuviera no afectaría eso.
Pero
tenía que luchar con lo que tenía.
"¡Si
crees que somos menos capaces de luchar que tú, te arrepentirás!" ‒ Gritó
Raphtalia, cambiando su katana por la Katana del Tigre Blanco.
Exactamente.
Ahora podíamos usar armas que nuestros niveles y estadísticas nos habían
impedido usar antes.
No
sabía qué tipo de efecto esperar de ella, pero la Katana del Tigre Blanco
estaba hecha de un material mejor que el Escudo del Dragón Demoniaco, así que
probablemente era una fuerza a tener en cuenta. Raphtalia apenas podía
levantarla antes, ¡pero las cosas eran diferentes ahora!
"¡Aquí
vooooyyy!" ‒ Gritó Firo. Empezó a reunir poder mágico a su alrededor,
tarareando y cantando todo el tiempo.
Ahora
que estábamos conectados de nuevo a nuestro viejo mundo, Firo debería poder
usar más de sus poderes de firorial. Eso significaba que ahora tenía acceso a
una combinación ideal de ataques y habilidades de apoyo.
Habíamos
perdido a Kizuna y a los otros, y Kyo estaba bloqueando mi uso de la energía de
la Tortuga Espiritual, pero no íbamos a perder tan fácilmente.
"Heh.
¡Idiotas! ¿No se olvidan de algo?" ‒ Gritó Kyo, señalándonos.
Probablemente
iba a usar su ataque basado en estadísticas para tratar de causar daños graves.
Su
poder ha sido aumentado como el resto de nosotros, así que era fácil imaginarlo
con más trucos mortales bajo la manga.
Una
vez que bajara mis defensas, me golpearía con un ataque especial que no podría
bloquear... o eso pensé. Miró a Rishia.
"Supongo
que me encargaré del estúpido Héroe del Escudo luego. Me ocuparé primero de
esta muchacha obsesionada con la justicia" ‒ dijo señalando con el dedo a
Rishia.
Pero
antes de que pudiera hacer algo, antes de que pudiera murmurar un
encantamiento, Rishia cruzó la habitación como si estuviera usando haikuikku.
Ella dio una voltereta y derribó a un neo-guardián con un golpe.
“?!”
"¿Por
qué estás tan sorprendido? Pareces pensar que soy una tonta, ¡y me molestas con
tus pequeñas burlas! ¡Ahora verás lo equivocado que estás!"
¿Ella
sabía lo que había pasado?
Rápidamente
revisé sus estadísticas y apenas podía creer lo que veían mis ojos.
Esperaba
encontrarlos más altos que antes, quizá más cerca de los míos.
Esperaba
encontrar sus habilidades mejoradas un poco, pero todas sus estadísticas habían
subido dramáticamente… ¡superando incluso las de Firo! Eran más altas que las
de Firo, ¡incluso teniendo en cuenta los ajustes de crecimiento de mi escudo!
Si
así era una Rishia despertada, ¡era una fuerza a tener en cuenta!
"¿Qué
fue eso? ¡Estos neo-guardianes tienen el poder de ambos mundos! ¡¿Cómo lo
derrotaste tan fácilmente?! ¡Idiota!"
"¿Quién
es el tonto aquí?"
Rishia
era tan poderosa ahora que probablemente podría derrotar a un héroe.
Dicen
que los grandes talentos toman mucho tiempo en despertar.
Tal
vez Rishia era del tipo que se volvía increíblemente poderosa después de cruzar
cierta línea. Quiero decir, por supuesto, eso es lo que esperaba todo este
tiempo. Por eso había gastado tanto tiempo y energía en ella.
Una
vez que llegaba a esa línea, era algo nuevo, algo completamente diferente a lo
que había sido.
El
mundo para el que fui convocado tenía un tope en el nivel 100. Aparentemente,
había limitaciones similares en el mundo de Kizuna. Si el aumento de poder de
Rishia llegara después del nivel 100, sus talentos permanecerían inaccesibles
para siempre.
La
vieja del Hengen Muso dijo que tenía talento, y esto debe ser lo que quiso
decir. Cristal había dicho lo mismo cuando vio a Rishia en la última batalla
con Kyo.
Pero,
¿cómo sería Rishia cuando estuviera completamente fortalecida, cuando pudiera
usar todos sus talentos latentes?
Los
ataques de Kyo eran al menos tan poderosos como nunca lo habían sido, pero
ahora ella era más que poderosa, más que lo suficientemente rápida como para
evitarlos.
"¡ARRGHGH!
¡Eres tan molesta! ¡Molesta! ¡¡¡Molesta!!!" ‒ Kyo se lamentó, tirándose
del pelo.
Cuando
convocó la ola, habíamos perdido a la mitad de nuestros aliados, pero empezaba
a parecer que estábamos mejor como estaban las cosas ahora. Eso no quiere decir
que la victoria estaba garantizada, pero su truco con la ola podría haber sido
un error de cálculo.
"¡Estás
empezando a molestarme de verdad!"
"Tú
eres el que hizo esto, ¿entonces de qué te quejas? Ahora sólo tenemos que
acabar contigo".
"Sí"
‒ dijo Raphtalia, deslizando la espada dentro de su vaina y reuniendo su poder.
No
sabía cómo reaccionaría la espada al nuevo nivel de Raphtalia, pero la piedra
preciosa que había puesto en la vaina se estaba cargando para un haikuikku muy
rápidamente.
"¡Yo
taaambiéééén!" ‒ Gritó Firo. Estaba cargada y lista.
Raph-chan
se sentó en mi hombro, animada para la batalla.
"Es
suficiente. Iba a jugar con ustedes, pero ya he tenido suficiente. No tiene
sentido jugar con gente como ustedes" ‒ suspiró Kyo, pasando sus dedos por
su pelo. ‒ "Sí, sí, subieron de nivel y están todos geniales. Pero sigues
olvidando esto, así que supongo que tendré que decírselos yo mismo".
"¿Sí?
¿Qué es eso?"
"Las
armas sagradas y las armas vasallas en este mundo se les pueden aumentar el
poder de la misma manera. Pasaste todo ese tiempo con ‘mira su cara’, así que
deberías saberlo".
"...
Cierto."
Ya
me había dado cuenta de lo que quería decir, y seré honesto, estaba preocupado.
Sentí que el sudor frío me picaba en la frente.
Kizuna
y los demás habían descubierto varias formas de mejorar sus armas sagradas y
vasallas, por lo que, por supuesto, habían compartido toda esa información. Era
algo obvio que hacer. Incluso yo había tenido una reunión con los otros tres
héroes en mi viejo mundo para compartir lo que sabíamos sobre el aumento de
poder.
Pero
hasta que Raphtalia fue elegida para blandir la katana, los otros habían sido
más poderosos que ella.
“A
decir verdad, he sido bastante cauteloso con esos ataques basados en estadísticas,
así que por supuesto, tengo maneras de lidiar con ellos. ¡¿Pero qué hay de ti?!”
Durante
mucho tiempo pensé que sólo L'Arc y los otros me atacarían con un ataque al
índice de defensa, así que no había estado alerta. El Escudo del Tigre Blanco tenía
un ataque de bloqueo que mitigaría parte del riesgo. Cambiar a él sería una
buena idea.
Pero
no quería perder mis efectos de apoyo. Debe haber una razón por la que él no
usó esos ataques contra Raphtalia y los otros.
"Así
que aquí está el verdadero problema. Presto mucha atención a la información,
¿sabes? Entonces, ¿pensaste que no sabía los métodos de mejoramiento que tú y
tus amigos de armas vasallas han usado? ¿Quién crees que derrotó a Albert, el
portador del arma vasalla del espejo, en un principio? ‒ dijo, abriendo su
libro y mostrándome una página de él.
"Aprendí
sobre los métodos del Héroe de Caza hace poco. Tendré que añadirlo a la
lista."
Sabía
lo que intentaba decir.
Kyo
conocía los métodos de mejoramiento usados por Kizuna, Cristal, L'Arc, Ethnobalt
y Raphtalia. Sabía cómo habían mejorado sus armas. Él mismo tenía un arma
vasalla, y sabía cómo funcionaba la de Albert.
Cristal
había dicho que los aumentos de poder funcionaban mejor con armas sagradas.
Las
armas vasallas no respondían tan bien, pero aun así, si hubiera combinado el
conocimiento de los métodos de las armas sagradas y de las seis armas vasallas,
ni siquiera podría adivinar cuánto poder ejercería.
Pero
entonces, ¿cómo nos las arreglamos para acorralarlo así?
Lo
único en lo que podía pensar era, y era sólo una suposición, pero basándome en
la forma en que Cristal y los demás habían reaccionado....
"Deja
de fanfarronear. Las armas vasallas te desprecian. ¿Crees que puedes controlar
su poder?" ‒ Grité, apuntándole con el dedo.
Apretó
los dientes y dijo ‒ "¡Piensa lo que quieras! ¡Ven a probarme!"
Yo
tenía razón, lo sabía. El libro de las armas vasallas despreciaba al hombre que
lo sostenía.
No
sabía cómo se las arreglaba para mantener el control, dadas las circunstancias,
pero no parecía que tuviera un control perfecto sobre todo su poder. Ahora
intentaba hacernos creer que se había estado conteniendo todo este tiempo. ¿Y
cómo se suponía que de repente se haría más fuerte? Tendría que encontrar
alguna forma de aumentar sus poderes con algún tipo de entrada externa. Y si
ese fuera su plan, trataría de llenarse con la energía de la Tortuga
Espiritual.
"Rishia".
"¡Sí!
¡¿Qué pasa?! ”
Ella
todavía estaba un poco nerviosa, pero estaba llena de una ardiente necesidad de
justicia y lista para luchar.
"¿Puedes
llevar a cabo el ataque que te enseñó la vieja?"
La
vieja podía usar ataques al índice de defensa sin sudar. Tenía el
presentimiento de que haría maravillas.
"¡Haré
lo que pueda!"
"Raphtalia,
¿cómo vas?"
"¡Lista
para usar una habilidad!"
"¿Qué
hay de mí?" ‒ Chilló Firo.
"Prepárate
para atacar. Eres más que fuerte".
"¡Okaaaay!"
‒ Gritó Firo. Ella siguió tarareando una canción que elevó todas nuestras
habilidades. Ahora que ella era una firorial y una hada zumbadora, estaba
sirviendo sobre todo como apoyo en la batalla.
También
teníamos muchas sorpresas bajo la manga.
No
podía usar el Escudo Corazón de la Tortuga Espiritual en este momento, y
nuestro movimiento se vio un poco impedido por el campo gravitatorio que Kyo
estaba usando. Pero habíamos recibido un gran aumento de nivel, así que al
menos podíamos movernos un poco. Ahora teníamos que encontrar una forma de
derrotar a Kyo, que estaba drogado con la energía de la Tortuga Espiritual y
sabía de todos los métodos de mejoramiento que habíamos usado.
Nos
quedamos sin tiempo.
"¡Mueran!"
"Escudo
Antiaéreo".
Kyo
atacó con un ataque basado en las estadísticas, pero yo lo bloqueé con Escudo Antiaéreo.
El escudo se rompió bajo el peso del ataque, pero lo detuvo. Al menos los
escudos eran lo suficientemente fuertes para detener un ataque.
"¡Maldición!
Un bloqueo decente. ¡Idiota insolente!"
"¡Allá
voy!"
"¡Sí!"
Raphtalia
desenvainó ambas espadas a la vez.
El
movimiento haikuikku que se activó fue el doble de poderoso de lo habitual, y
corrió por la habitación a una velocidad cegadora. Páginas del libro de Kyo se
movían por la habitación para bloquear sus ataques, pero Raphtalia se deslizó
fácilmente entre ellas y corrió hacia delante para realizar su propio ataque.
"¡Ataque
de Apoyo!"
Sabía
que no iba a llegar a tiempo, pero lancé el dardo tan rápido como pude. Rishia
salió corriendo tras él, rompiendo todas las páginas que se interponían en su
camino con ataques basados en el índice.
"¡Haikuikku!"
Firo
se disparó detrás de Rishia.
"¡Patético!
¡Débil!" ‒ Kyo extendió sus manos ante él, y las páginas de su libro se
agitaron furiosamente.
¡¿Qué
estaba haciendo?!
“¡Ya
han caído en mi trampa! ‘Librería’” ‒ gritó y la habitación se volvió en blanco
y negro, y el sonido de un libro cerrándose de golpe resonó en mis oídos. ‒ "¡Ahahaha!
A ver si te gusta esta habilidad de restricción de compresión espacial".
Kyo
desapareció ante nuestros ojos.
Pero
había algo extraño en ello.
Habíamos
estado en su laboratorio subterráneo todo este tiempo, pero ahora parecía que
estábamos en una habitación blanca.
La
habilidad de Kyo había producido ataques que se arremolinaban a nuestro
alrededor. Pájaros hechos de llamas y rayos, tornados, enormes rocas y un
enorme rayo de partículas como el que había usado la Tortuga Espiritual.
"¡Ahaha!
¡Tomen eso! ¿Puedes bloquearlos a todos a la vez? Cualquiera de ellos te
matará. ¡Mejor esquiva tanto como puedas!"
Maldita
sea. Su habilidad nos atrapó en un espacio confinado y nos bombardeaba con
ataques. ¿Qué se suponía que debíamos hacer?
"Escudo
Estrella Fugaz".
La
barrera detuvo algunos de los ataques, y luego se rompió, pero sus pedazos
rotos permanecieron flotando en el aire.
El
objetivo, supongo, era toda la habitación.
Mientras
esperaba que se dispararan los fragmentos de la barrera, bloqueaba los ataques
con mi escudo, esquivando siempre que podía.
Era
muy difícil hacerlo en un espacio tan reducido, pero no era algo que no pudiera
manejar.
Saqué
la bioplanta de mi escudo y la obligué a germinar.
Crecía
increíblemente rápido, y pronto rompería el espacio mismo.
"¡Como
si fuera a dejar que eso pasara!" ‒ Kyo envió una habilidad a la
bioplanta, destruyéndola instantáneamente. ‒ "Sabes, me preguntaba cómo te
las arreglaste para salir del laberinto. Ahora lo sé. Gracias."
Maldita
sea. Si no encontrara una salida, los ataques de Kyo nos matarían a palos.
"¡Hya!"
"¡Ho!"
"¡Rafuuuu!"
Rishia,
Firo y Raph-chan intentaron atacar las murallas, pero sólo fueron capaces de
hacer pequeñas grietas, que se repararon al instante.
Habilidades
y ataques nos caían encima todo el tiempo.
Continué
usando la secuencia de Escudo Antiaéreo, Segundo Escudo, Tercer Escudo, Escudo
Prisión, y Escudo Estrella Fugaz. Funcionaba, pero no podía seguir así para
siempre.
Debe
haber un límite en cuanto a lo que el espacio mismo puede soportar. Si
pudiéramos atravesarlo, podríamos escapar.
El
problema era que Kyo seguía reformando las murallas y enviando un aluvión de
ataques contra nosotros todo el tiempo. Me parecía que las páginas del libro
estaban produciendo los ataques, y las paredes de la habitación debían ser
equivalentes al campo de visión de Kyo.
"¡Raph-chan!
¡Cubre esa pared con una cortina de humo!"
"¡Rafuuuu!"
Ella
sabía a lo que me refería, y usó su magia de ilusión para cubrir la habitación
de humo. Luego también coló una alucinación en el centro de la pared de humo.
"¿Crees
que puedes esconderte? ¡Piénsalo de nuevo!"
Un
viento aullante sopló por la habitación y se llevó todo el humo, pero la
alucinación que se coló entre el humo permaneció, y por un momento, todas las
habilidades llovieron en el lugar equivocado.
"¡Maldición!
Pero aún no he terminado" ‒ fingiendo estar herido, señalé a Raphtlia y a
Rishia con la mano.
Puse
una mano sobre la boca de Firo para mantenerla callada.
Señalé
a mi escudo, y luego escribí ‘ira’ en el aire con mi dedo.
Los
ojos de Raphtalia se abrieron de par en par. Rishia estaba tan sorprendida que
dio un grito ahogado.
Iba
a quemar todo este lugar con Maldición Oscura Quemadora S, el ataque más fuerte
que tenía, uno que dejaba una maldición atrás para dificultar la recuperación.
Tenía
que intentarlo.
Raphtalia
agitaba la cabeza; sabía lo peligroso que era. Pero yo había sobrevivido un par
de veces antes.
Si
encerraba a todos en el Escudo Prisión, esperaba que todos pudiéramos
sobrevivir. Sólo para evitar el peor resultado posible, probablemente podría
usar una habilidad de protección en Raphtalia también.
Al
darme cuenta de que ya había tomado una decisión, Raphtalia se rindió e hizo
señas a Firo, Rishia y Raph-chan para que la siguieran y se alejaran lo más
posible de mí.
¿Cuál
era el problema? Había hecho esto muchas veces. Como todas las veces,
necesitaba sobrevivir a mi propio ataque.
“...”
¿Cuántas
veces me he permitido usar este ataque?
Era
un escudo maldito en el que me vi forzado a confiar en mis momentos más bajos,
y estaba a punto de volver a confiar en su poder.
Envolví
con fuerza mis dedos alrededor de la empuñadura del escudo, cerré los ojos,
estabilicé mi respiración y cambié los escudos.
Debido
a la mayor cantidad de piedras del núcleo del dragón, ¡el escudo se había
vuelto más poderoso!
Escudo de la Ira IV
(despertado) +7 50/70 SR Capacidades Bloqueadas:
Bonos al Equipar: Habilidad
Cambiar Escudo (ataque), Doncella de Hierro, Sacrificio de Sangre, Explosión de
Megido.
Efecto Especial:
Maldición Oscura Quemadora S, Aumento de Fuerza, Furia de Dragón, Rugido, Vasallo
Berserk, Compartir Poder Mágico, Túnica de la Rabia (grande), Poder Mágico del
Dragón Demoniaco.
Nivel de Maestría:
0
Había
tenido una vaga sensación de temor al usar este escudo, ¡pero no esperaba que
se volviera tan poderoso!
La
apariencia del escudo también había cambiado, volviéndose de alguna manera aún
más ominosa y brutal. Era tan grande que era casi imposible sostenerlo con un
solo brazo. Creo que escudos como este se llamaban escudos de torre.
Mi
corazón estaba lleno de ira y odio poderosos, mucho más furioso que antes. Y
sin embargo, mis relaciones con mis amigos, mi confianza en ellos, mi deseo de
protegerlos del daño... esas emociones también se habían fortalecido. Eran lo
suficientemente fuertes como para evitar que perdiera el control sobre mí mismo.
No
sabía de qué se trataban los dos últimos efectos especiales, pero estaba seguro
de que hacían referencia a algún tipo de poder que aún no había visto, algo que
también podría ser más peligroso que cualquier cosa que aún no hubiera visto.
En
cuanto a Explosión de Megido, ni siquiera quería probarlo. No estaba seguro de
si sobreviviría a un solo uso.
"Ugh..."
‒ Firo gimió. Sus brazos y piernas estaban envueltos en rugientes llamas
negras. Estaba haciendo todo lo que podía para mantener el control sobre sí
misma.
Pero
el odio que se arremolinaba dentro de mí era demasiado fuerte. ¡Era tan fuerte
que iba a perder el conocimiento!
"¡Rafuuuu!"
Raph-chan
saltó sobre la cabeza de Firo y empezó a mordisquear su capucha. En ese
momento, llamas negras estallaron de su cola hinchada.
"¡Yo
también!" ‒ Raphtalia puso sus manos sobre Raph-chan y Firo, y cerró los
ojos concentrada.
Sentí
que el peso del odio y la rabia disminuían un poco. Estaban aceptando parte de
mi carga. Justo cuando pensaba que las llamas me consumirían, rociaron agua en
mi corazón.
Me
sentí increíble. Como agua cristalina que se filtra en una garganta reseca.
Sí,
podría seguir.
"¡Vamos!
¡Escudo Prisión!"
Una
jaula de escudos apareció en el aire alrededor de Raphtalia y las demás,
protegiéndoles de la lluvia de habilidades de Kyo.
De
repente, el escudo me pesaba mucho, como si hubiera duplicado su tamaño. Una
retorcida y parpadeante luz emanaba de su superficie.
"¡Arrrhhhhhhhh!"
“¡¿Qué?!”
Llamas
malditas rugieron y saltaron del escudo, quemando todo lo que se veía y
destruyendo instantáneamente el espacio en el que Kyo nos había atrapado. Hubo
un estallido y un siseo y nos encontramos de nuevo en el laboratorio
subterráneo.
Me
di la vuelta y me alegré de ver que el Escudo Prisión había sobrevivido ileso.
"Rompiste
mi habilidad. Estoy impresionado."
"Por
supuesto que sí. Te engañamos."
Tuvimos
tiempo de realizar el ataque porque había sido engañado para que atacara la
alucinación que hizo Raph-chan.
"¡No
has estado cerca de ver los ataques de los que soy capaz!"
¿Debería
usar el Sacrificio de Sangre con él?
No.
Si fracasara en el casteo, todo sería en vano.
No
era el momento para eso. No, todavía no.
Kyo
lanzó otro ataque y el Escudo Prisión se rompió. Raphtalia y las demás quedaron
libres y blandieron sus armas contra Kyo, corriendo hacia delante para atacar.
"¡Cuchilla
Valiente! ¡Neblina!"
Usando
ambas espadas, trazó una cruz en el aire que atravesó la habitación, rompiendo
las páginas del libro que Kyo había enviado para detenerla.
"¡Ha!"
Rishia
estaba desencadenando furiosamente los ataques al índice de defensa que había
aprendido de la vieja.
"¡Ha!"
‒ Ladró Firo, corriendo por la habitación con una patada en espiral.
"¿Esos
viejos ataques? ¡¿Otra vez?! Nunca aprenden, ¿verdad? ¡Cuarta Composición: Constricción!"
El
libro de Kyo se abrió y una jaula emergió de sus páginas que encerraron a
Raphtalia y a las demás.
¡Podría
usar sus habilidades muy rápido!
"¡Continuación!
¡Falso Techo!"
Las
agujas crecieron del techo de su jaula y llovieron sobre todos los que estaban
adentro.
"¡No
tan rápido! ¡Escudo Antiaéreo! ¡Segundo Escudo! ¡Tercer Escudo!"
Tres
escudos se materializaron en el aire sobre sus cabezas para protegerlas de la
lluvia de agujas.
"¡Jaaaa!"
‒ Gritó Raphtalia, desenvainando su espada rápidamente y cortando la jaula que
la encerraba. Volvió a liberarse y corrió hacia Kyo.
Es
cierto. Éramos más fuertes de lo que habíamos sido.
Podemos
derrotar a Kyo. ¡Incluso sin Kizuna!
"¿Creen
que funcionará? ¡Telegrafían sus movimientos con tanta antelación!"
Kyo
también había aumentado sus habilidades, y Raphtalia no era lo suficientemente
rápida como para golpearle antes de que pudiese evadir su ataque.
No
éramos lo suficientemente rápidos. Las palabras ‘los ataques no importan si no
se conectan’ seguían corriendo por mi mente.
Si
mis amigas pudieran cargar sus ataques de velocidad, probablemente podríamos
alcanzarlo. Pero, si lo hacían, mientras cargaban, él tendría tiempo para
encerrarnos en ese espacio confinado otra vez.
Por
supuesto, si lo hiciera, podría ser capaz de sacarnos usando las llamas malditas
de nuevo, pero ese no era el tipo de plan que funcionaría para siempre. Sólo
para hacer las cosas aún más molestas, ocasionalmente teníamos que acabar con
una copia de una bestia sagrada furtiva. Y, los neo-guardianes que derrotamos
se estaban regenerando y volviendo a ponerse de pie.
"¡Tomen
esto! ¡Octava Composición: Castigo Divino!"
Las
páginas de su libro se agitaron salvajemente cuando dijo el nombre de la
habilidad. Entonces un rayo surgió de ellos y nos disparó directamente.
¡Nos
perseguía cuando intentamos evadirlo! ¡Era un rayo! Parecía un ataque que se
podía llevar a cabo con magia, lo que me hizo pensar, ¿había algún otro aspecto
que no hubiéramos visto todavía?
"Escudo
Antiaéreo".
"¡Ja!"
El
rayo rápidamente cambió de rumbo y evitó el escudo que se materializó frente a
él.
¡Maldita
sea! ¿Qué se suponía que debía hacer con un ataque que no podía bloquear?
"Escudo
Estrella Fugaz".
Raphtalia
y los otros estaban haciendo todo lo que podían para evitar el ataque del rayo.
Así que rápidamente desplegué el Escudo Estrella Fugaz para protegerlas y
detener los crepitantes voltios. Debido a que el Escudo de la Ira IV era tan
poderoso, la barrera fue capaz de detener el ataque sin romperse.
No
se rompió, pero crujió, y empezó a brillar con el calor.
¿Qué...
qué estaba pasando?
La
propia barrera repentinamente disparó brillantes orbes de llamas oscuras. Se
estrellaron contra las revoloteantes páginas del libro de Kyo, quemándolas
instantáneamente.
Me
alegraba mucho ver que los ataques de Kyo fracasaban uno por uno.
Los
orbes estaban rebotando, quemando todo lo que tocaban. Los cuerpos de las
copias de las bestias sagradas caídas, los homúnculos, los cuerpos de Basura #2
y Albert, fueron todos reducidos a montones de cenizas.
"¡Eres
tan odioso! ¡Ya he tenido suficiente! ¡Toma esto!"
Él
hojeó su libro y algo apareció en el aire ante nosotros. Algo que se parecía a
la cabeza de la Tortuga Espiritual.
"¡Lástima
que lleve tanto tiempo! ¡Pero más vale que estés agradecido! ¡No mucha gente
puede ver este ataque!"
Estaba
alardeando, debe ser una jugada final especial.
¿Podría
bloquearlo y sobrevivir? Honestamente, no lo sabía.
"¡No
lo creo!" ‒ gritó Raphtalia.
Corrió
hacia Kyo con Firo y Raph-chan a su lado, pero rápidamente desplegó capas sobre
capas de barreras para protegerse.
Los
ataques al índice de defensa de Rishia y Raphtalia rompían las barreras muy
rápidamente, pero no fueron suficientes para romperlas por completo.
Y
ese campo gravitacional aún nos frenaba. ¿Cómo resolvimos este problema la
última vez, cuando Ost estaba con nosotros?
¿Puedo
hacerlo yo? ¿Podría lograrlo?
No
había razón para que me quedara ahí parado como un pájaro en la grama. Tenía
tiempo de intentarlo. Tenía que usarlo.
Claro,
estaba solo. Y claro, realmente no sabía cómo usarlo, pero grité con fuerza el
conjuro del Camino de la Vena del Dragón.
Me
concentré lo mejor que pude y traté de recordar cómo me había sentido.
Therese
me había mostrado cómo guiar mi poder, así que traté de hacerlo lo mejor que
pude. El escudo era el médium y el poder era el mío. Le pedí a la energía de la
Tortuga Espiritual, en el aire que nos rodea, para que me ayudara.
...
Pero no estaba funcionando.
Sentí
que el escudo respondía, muy levemente. Podía sentir la energía de la Tortuga
Espiritual en la habitación reunida en él.
Tal
vez no había suficiente energía, pero tenía que intentarlo. Recordé el conjuro
para el Todos Aura Liberación (Aura de Liberación a Todos).
Antes
de decir las palabras, sentí una fuerte sacudida en mi columna vertebral, algo
que nunca había sentido antes. Era como la voz que a veces oía cuando usaba el
Escudo de la Ira, sólo que diferente. No sabía lo que era. Pero sabía que había
algo muy dentro de mí, algo aterrador.
‒Estás
tratando de lanzar la magia antigua, ¿no?
‒Tu
muerte aquí me causaría grandes inconvenientes. Supongo que debo ayudarte.
La
voz envolvía mi corazón, sofocante y poderosa. No pude resistirme. Entonces, de
repente, el mismo rompecabezas que Ost me había mostrado apareció ante mis ojos
y comenzó a armarse.
‒Eso
debería ser suficiente.
‒Pero
el uso de mi poder tiene un precio muy alto. Prepárate para pagarlo.
‒¿Entiendes
lo que pides?
No
tenía ni idea de quién me hablaba, pero podía oír la voz con claridad.
No
sabía cuál era el precio y no sabía qué destino me esperaba, pero sabía lo que
vine a hacer aquí y no me echaría atrás. ¡Kyo tenía que pagar por sus crímenes!
No
lo dudé. Estaba listo para activar el hechizo.
Pero
antes de empezar a cantar, aparecieron iconos para seleccionar el objetivo.
¿Qué?
Eso normalmente no pasaba hasta después de que se lanzara el hechizo.
Había
tres iconos, así que sólo podía seleccionar tres objetivos.
Estaba
a punto de castearlo en mí mismo.
Iba
a usar Todos Aura Liberación (Aura de Liberación a Todos).
¿Quién
se beneficiaría más con el aumento de estadísticas y habilidades?
Podía
contar con Raphtalia, pero Rishia también necesitaba un aumento de habilidad.
Rápidamente
enfoqué el hechizo para lanzarlo en Rishia. De repente, mi campo de visión
cambió a rojo.
Tenía
un mal presentimiento sobre esto. Un sentimiento de que no debería usar el
hechizo después de todo.
¿Y
si no fuera yo quien pagara el precio? ¿Y si todos tuviéramos que pagar?
‒Tsk,
Tsk. ¿Crees que la victoria llega a los cobardes?
‒El
Héroe de la Caza conocía los riesgos y lo usó de todos modos.
¡Maldita
sea! Incluso si eso fuera cierto, no podría pedirles a Raphtalia y a los demás
que sufran.
"¡Amo!
¡Yo lo haré! ¡Compensaré a la señorita tortuga! ¡Te ayudaré a ti, a hermana
mayor y a todos!"
¿Firo?
¿Podía
oír lo que yo estaba oyendo? ¿Cómo sabía lo que estaba pasando?
Supongo
que no fue tan sorprendente. Siempre había sido influenciada por el Escudo de
la Ira.
Ella
tenía razón. Si me contengo, podríamos perder una pelea que podríamos haber ganado.
Cambié
el hechizo para centrarme en Firo en vez de en Rishia.
Y
no pasó nada, no hubo parpadeos rojos.
Era
como... como si algo en mi interior me hubiera advertido que no pusiera a
Rishia como objetivo. Como si mi corazón hubiera bombeado los frenos.
¡Ya
era hora!
"Yo,
el Héroe del Escudo, tomo prestada la fuerza del Dragón Demoniaco y el poder de
la ira para comandar a los cielos, comandar a la tierra, desafiar toda razón,
unirme y derramar sangre. Oh gran fuerza de los dragones, une el poder de los
héroes con la magia, la fuerza de la vida y el sacrificio. La fuente de poder
que es el Héroe del Escudo te lo ordena. ¡Lee y comprende todo lo que está bajo
el sol, y muéstrame tu poder! Te ordeno que les des todo".
"¡Todo
Sacrificio Aura (Aura de Sacrificio a Todos)!"
Delirios de Lord:
Ahí es cuando uno se pregunta
¿Cuáles serán las consecuencias?