Traductor: Lord
Editor: Lord
04
Como un Jabalí Atacando
Me
desperté de repente con el sonido de las explosiones. El suelo estaba
temblando.
“¡¿Qué
es eso?!”
“¡¿Rafu?!”
"¿Qué
está pasando?"
“¡Fueh!
¡¿Maestro Itsuki?!”
Estábamos
durmiendo en la casa de Kizuna en el pueblo vecino. Saltamos de la cama y
tratamos de orientarnos. Corrí hacia la ventana para mirar hacia afuera.
Estábamos en el tercer piso y el ruido venía de abajo.
"No
sé qué está pasando, pero no suena bien. Tengan cuidado."
Todos
asintieron.
Salimos
de la habitación y nos dirigimos al primer piso, donde encontramos a Kizuna, Cristal
y Chris. Sus armas fueron desenvainadas y estaban de frente a la entrada.
Aparte
de esos tres, éramos los únicos en la casa.
L’Arc
y Therese estaban en el castillo, y Ethnobalt estaba trabajando en la
biblioteca.
Actualmente
estaba usando un escudo que había recibido después de la batalla con Basura #2,
el Escudo Clon del Tigre Blanco. Finalmente había alcanzado un nivel que lo
desbloqueaba, pero me sorprendió lo débil que era. El Escudo Corazón de la
Tortuga Espiritual tenía un índice de defensa más alto, pero no había sido
capaz de abrir ese escudo desde que crucé a este mundo.
Escudo Clon del
Tigre Blanco (Despertado): Capacidades bloqueadas:
Bono al Equipar: habilidad:
Escudo en Cadena
Efecto del equipo: Aumento
de Agilidad (medio), Absorción de Impactos (bajo), Esquivar (bajo)
Las
habilidades y los efectos no eran muy emocionantes. Supongo que eso era todo lo
que podía esperar, ya que el enemigo sólo había sido un clon del Tigre Blanco
original. El aumento de agilidad sería útil, pero había un problema con la
absorción de impactos y el esquive. Si fuera a ser positivo al respecto, diría
que podrían resultar útiles contra los ataques al índice de defensa, como los
que usaban Cristal y L'Arc.
Si
tan sólo hubiera podido tener en mis manos algunos de los materiales reales,
las cosas podrían haber sido diferentes. Pero según Romina, ya casi no quedaban
en el mundo, porque muchas personas y países diferentes los habían utilizado.
L’Arc gestionaba el almacén nacional, y prácticamente no quedaba nada.
Pero
me habían prometido que me encontrarían algo antes de que llegara la batalla
final.
L'Arc
pensaba que mi nivel no sería lo suficientemente alto como para acceder a
cualquier escudo que los materiales hubieran desbloqueado por un tiempo, y no
podía discutir con su lógica.
De
todos modos, este escudo no tenía efectos de contraataque, así que no quería
usarlo. Aun así, podía cubrir el espacio entre escudos hasta que llegara a un
nivel en el que pueda acceder al Escudo Corazón de la Tortuga Espiritual.
No
había usado el Escudo de la Ira en mucho tiempo, así que pensé que podría
cambiar a él si lo necesitaba. Pero también tenía un efecto poderoso en Firo, y
como ella había cambiado tanto cuando cruzamos entre los mundos, me preocupaba
un poco cómo ese escudo la afectaría ahora.
La
pluma de Fitoria le había impedido perder la cabeza, pero no pensaba que
funcionaría en este mundo.
Así
que por eso estaba usando este escudo. A pesar de que no tenía los mejores
efectos, al menos podía depender de él por su nivel de defensa.
Oh,
y Escudo en Cadena parecía ser una versión diferente de Cambio de Escudo.
Cuando
usaba Escudo Antiaéreo, luego Segundo Escudo, y así sucesivamente, podía usar Escudo
en Cadena para unirlos a todos en una cadena. Era muy útil porque podía
moverlos todos al mismo tiempo. Si pudiera averiguar cómo trabajar con él,
probablemente sería una buena habilidad para tener en mi arsenal, pero tal como
están las cosas ahora, no estaba muy seguro de cómo usarlo.
"Así
que tienes nuevos amigos. Pero ahora no te salvarán" ‒ gritó alguien.
Quienquiera que fuese, Kizuna y Cristal estaban frente a ella en la entrada,
que, por cierto, había sido completamente destruida.
Una
mujer en una hakama estaba entre los escombros.
Su
pelo estaba peinado hacia atrás en una cola de caballo. Ella era de la misma
altura de Cristal.
Tenía
una cara bonita... ya sabes, siento que he estado diciendo esto mucho
últimamente. Pero de todos modos, era hermosa.
"¿Qué
demonios está pasando? Kizuna, ¿es amiga tuya?"
No
la había visto en ninguna de las fotos grupales de Kizuna. ¿Quizás había estado
enferma ese día?
No
parecía que hubiera venido a presentar sus respetos.
"¿Parece
una amiga?"
"Estábamos
a punto de acostarnos cuando empezó a golpear la puerta y a armar un
escándalo."
"¿No
tienes idea de quién es?"
"A
juzgar por su entrada, no creo que le agrademos."
"Buen
punto."
De
regreso al mundo de donde vengo, había mucha gente que me odiaba, tantas que no
podría contarlas si lo intentara. Dudo mucho que los reconociera a todos si
aparecieran en mi puerta.
"¿Quién
eres tú?" ‒ Preguntó Kizuna a la atacante.
Yo
no esperaba una respuesta honesta.
"¡Me
llamo Yomogi Emarl! ¡Vengo en nombre de Kyo para castigar a aquellos que poseen
armas sagradas y vasallas!"
“...”
Huh.
Así que nos dijo la verdad. Todo fue un poco confuso.
Kizuna
no se inmutó ni bajó la guardia ni un segundo, pero parecía enfadada por la
estupidez de su oponente.
Quiero
decir, me alegro de que haya sido tan comunicativa con la presentación, pero,
¿cuán estúpido puedes ser? ¿Era realmente una asesina que Kyo envió?
"¡Los
derrotaré! ¡Vengan hacia mí!" ‒ Gritó Yomogi, desenvainando una extraña
espada y corriendo por la habitación hacia nosotros.
"Pensé
que querías que fuéramos hacia ti. ¿Qué demonios?"
Esta
chica estaba seriamente confundida.
"¡Hya!"
¡Pero
era rápida! Era tan rápida que, de no haber sido por mi reciente entrenamiento
y aumento de nivel, probablemente no hubiera podido reaccionar a tiempo.
Reflexivamente
me disparé a través de la habitación, salté ante Kizuna y Cristal, y levanté mi
escudo justo a tiempo para bloquear su espada, que chocó contra el escudo.
Temblaba en mis manos.
"Ugh..."
No
era lo suficientemente poderosa como para atravesar mis defensas, pero me costó
todo lo que tenía para mantenerme en pie.
No
estaba seguro si el Escudo Clon del Tigre Blanco iba a ser suficiente para
sobrevivir a esta pelea.
"¡Espada
Trueno!"
Un
chisporroteante ataque de un rayo fue disparado por su espada.
"¡No
te dejaré!" ‒ Gritó Raphtalia, sacando su katana de su vaina totalmente
cargada.
Su
ataque de velocidad se activó, pero...
"¡Tus
pasos están mal!" ‒ Yomogi se detuvo, saltando un paso hacia atrás y
evitando el ataque de Raphtalia con su espada.
Ella
había sido capaz de ver hacia donde se dirigía Raphtalia. Aunque ella había
estado en su modo haikuikku. Aunque Kizuna y yo teníamos problemas para verlo.
"¡Raphtalia!
¡Atrás!" ‒ Cristal gritó, abriendo su abanico ‒ " ¡Danza Circular Formación de
Ataque: Flor de Viento!"
Cristal
giró sobre sus talones y golpeó a Yomogi con su abanico. Una flor hecha de luz
pura fue disparada desde el abanico, y el efecto de mi accesorio fue activado
al mismo tiempo, enviando tres de ellos. Ella había usado esa habilidad antes.
Estábamos
peleando en la casa de Kizuna, lo que me hizo querer contenerme. No querías
poner años de trabajo en hacer una casa sólo para destrozarla en una batalla.
"¡Ugh!"
Yomogi
se había apresurado a atacar a Raphtalia, pero tuvo que girar para esquivar el
ataque de Cristal.
"Así
que, todos van a formar un equipo contra mí, ¿verdad? Es justo como Kyo dijo,
¡son malvados!"
"¿Estás
bromeando? Irrumpiste en nuestra casa en medio de la noche."
"¿¡Ha!?"
‒ Yomogi me miró fijamente. Ella estaba sudando. ‒ "¡Así es! ¡Tenía que
dar prioridad a mi misión, así que elegí el camino cobarde!"
¿Eh?
¿Estaba bromeando? ¿Era una idiota?
Ella
era genuinamente confusa.
Y
sin embargo, podía seguir el ataque de Raphtalia, esquivar el ataque de Cristal,
moverse muy rápidamente, y sus ataques eran poderosos.
Esa
espada suya estaba despertando mi interés. Había algo extraño en ella. El
diseño me recordó a mi Escudo Corazón de la Tortuga Espiritual.
La
forma también era extraña. Las gemas en la empuñadura, la forma de la guarda...
Muchas cosas me recordaban a la espada de Ren. Y parecía ser capaz de usar sus
habilidades también.
"¡Pero
incluso si se unen contra mí, no se salvarán! No me importa a cuántos de
ustedes tenga que enfrentar, saldré victoriosa".
"¿Crees
que tienes una oportunidad contra todos nosotros juntos?" ‒ Me reí,
sonando como un pirata barato. Oh bien.
"Naofumi,
eso es lo que la gente dice antes de perder."
"Cállate,
Kizuna. No eres buena contra un oponente humano de todos modos. Retrocede y
déjaselo a los adultos".
"¡Cómo
te atreves!"
Kizuna
no era capaz de luchar contra otros humanos, y estaba bastante seguro de que este
personaje Yomogi era humana. Ella no parecía una persona Hierba, y tampoco
parecía una persona Espíritu.
"¡Te
lo mostraré!" ‒ Ladró Yomogi, corriendo hacia mí con su espada.
Yo
era el único hombre en el grupo, y estaba de pie en la parte delantera, así que
era natural que ella viniera hacia mí primero.
"¡Whoa!
Escudo Antiaéreo".
El
escudo apareció en el aire y la espada de Yomogi resonó contra él.
"¡Estás
tramando algo! ¡Pero no va a funcionar!"
Ella
se había precipitado hacia mí, pero ahora había decidido ser cautelosa, y
comenzó a retroceder.
Había
visto este tipo de cosas antes. Me pregunto qué le habrá dicho Kyo sobre el Héroe
del Escudo.
"Segundo
Escudo".
Justo
antes de que pudiera saltar, envié otro escudo, y apareció en el aire justo
detrás de sus rodillas.
“¡¿Eh?!”
"Tercer
Escudo".
Yomogi
apenas podía mantenerse de pie, así que para acabar con ella, envié un tercer
escudo volando hacia ella, y apareció en el aire junto a su pecho. Tuvo que retorcerse
en una posición antinatural para evitar los escudos. No podría aguantarlo mucho
tiempo, a menos que fuera una contorsionista profesional o algo así.
Sus
rodillas estaban dobladas hacia atrás sobre el escudo detrás de ella, y no
podía pararse para evitarlo, debido al escudo frente a ella. Estaba atascada.
"¡Cobarde!"
Aún
no se había caído, pero parecía que necesitaba toda su energía para evitar el
colapso.
"Me
impresiona que sigas de pie."
"L’Arc
me contó cuando le hiciste eso. Dijo que era muy difícil defenderse" ‒
dijo Cristal.
"Ese
es el Héroe del Escudo para ti" ‒ añadió Kizuna.
"Agradezco
el comentario, pero ¿podrían contribuir a la lucha ahora?"
"¡Allá
voy!"
"¡Yo
taaambiiéén!"
"Fueh...
¿Debería ayudar también?"
Raphtalia
corrió hacia adelante para aprovechar la inestabilidad de Yomogi, mientras que
Firo comenzó a cantar un encantamiento.
Rishia
estaba a tientas con un ofuda y preparándose para lanzarlo.
Iba
a coger la espada de Yomogi, sólo para asegurarme, pero no iba a llegar a
tiempo. Así que sólo había una cosa que hacer.
"¡Escudos
en Cadena!"
Una
cadena apareció y unió todos los escudos.
Debido
a su posición, Yomogi se encontró enredada en la cadena. Entonces los escudos
empezaron a girar y girar a su alrededor.
"Ugh..."
Era
una buena combinación. Perfecto, de verdad. La envolvería y trataría de sacarle
información sobre Kyo.
"¡Ha!"
Yomogi
tiró su espada al suelo. Con una erupción de chispas la cadena se rompió, y
todos los escudos desaparecieron.
Tenía
una espada muy buena. Si tan solo un cierto Héroe de la Espada que conozco
fuera la mitad de bueno con su espada....
...
No es que este fuera el momento o el lugar para sacar eso a colación.
"Eres
bastante bueno. ¡Pero no voy a perder!" ‒ Gritó Yomogi.
Pero
Raphtalia ya estaba volando hacia ella. Kizuna usó su ataque Señuelo de Cebo,
que duplicaría el efecto del siguiente ataque.
"¡Cuchilla
instantánea: Neblina!"
Con
un poco de suerte, esto debería terminar la batalla.
Raphtalia,
con velocidad enceguecedora, cruzó su espada, justo en Yomogi, terminando...
"¡Toma
esto! ¡Técnica Punta de Dragón!"
Yomogi
desapareció en un instante, dejando atrás una imagen residual antes de aparecer
al otro lado del ataque de Raphtalia con su espada desenvainada.
"Qué..."
Sus
espadas chocaron y bañaron el suelo con chispas.
"¡Aún
no!"
"¡Ugh!"
Yomogi
detuvo la katana de Raphtalia hacia un lado y empujó hacia delante en la
apertura.
¡No
en mi guardia!
"Escudo
Estrella Fugaz".
La
barrera apareció instantáneamente. La espada de Yomogi se estremeció contra
ella, protegiendo a Raphtalia y repelió a Yomogi. Firo corrió a contraatacar.
"¡Zweite
Cortador de Viento!"
Firo
agitó sus brazos y hoja tras hoja de viento fueron disparadas a Yomogi, quien
usó su espada para defenderse de cada una de ellas.
"¡Wow!
¡Amo! ¡Esta dama es dura!"
"Lo
sé. ¡Concéntrate!"
"¡Un
ataque muy extraño! ¡Verdaderamente un estilo de otro mundo!"
"¡Ja!
¡Podría decir lo mismo!"
"Naofumi,
¿no crees que hay algo extraño en su espada?" ‒ Gritó Kizuna.
Le
eché otro vistazo.
Había
una piedra preciosa en el mango, pero ahora parecía más un globo ocular.
Estaba
girando y girando en su lugar. ¿Qué era esa cosa?
"¡Más!
¡Más potencia! ¡Kyo hizo esta arma, y yo soy digna de empuñarla!"
La
espada parpadeó roja y pareció chisporrotear de calor antes de que medias lunas
salieran disparadas de su punta y volaran hacia mí.
"Ugh..."
‒ Incluso con la barrera del Escudo Estrella Fugaz en su lugar, no estaba
seguro si sería capaz de bloquearlo.
Preparé
mi escudo justo cuando la barrera se rompió a mi alrededor. Las hoces de luz
seguían viniendo, y chocaron contra mi escudo. Fue duro.
"¡Argh!"
Seguí
adelante con todas mis fuerzas y desvié el ataque, enviándolo volando hacia la
derecha.
Atravesó
la pared de la casa y voló hacia el cielo.
Acababa
de burlarme de la habilidad de este escudo, y ahora me había salvado la vida. ¡Oh
que ironía!
"Me
sorprende que sobrevivieras a eso. Enhorabuena. ¡Pero no me permitiré perder
contra villanos como ustedes!"
¿Iba
a usar el mismo ataque otra vez?
Entonces
noté algo extraño. Un trozo de la destrozada barrera seguía flotando en el
aire. La propia barrera se había roto, pero una de las piezas aún estaba allí,
flotando en el aire. ¿Por qué? ¿Tiene algo que ver con mi nuevo accesorio? ¿Eso
es todo lo que hacía?
No
tuve tiempo de preguntarme demasiado al respecto, porque el trozo flotante de
la barrera de repente se aceleró y se disparó hacia Yomogi.
“¡¿Qué?!”
Yomogi
se movió y usó su espada para bloquear la pieza de barrera que se le acercaba.
Ella fue capaz de detenerla, pero quedó abierta de par en par.
Supongo
que el accesorio hacia que mi barrera rota se convirtiera en un ataque volador.
"Primero
los extraños ataques. Ahora un ataque que convierte tu barrera defensiva en un
misil ofensivo. Ciertamente eres un tipo extraño."
Tenía
que haber una buena manera de poner en práctica esta nueva capacidad.
Lo
mejor del Escudo Estrella Fugaz era su corto tiempo de enfriamiento y su
eficiente uso de SP. Y ahora se convertiría en un ataque después de que se
rompiera, lo que era aún más útil, porque mi escudo actual no tenía ninguna
capacidad de contraataque. ¡Me gustó cómo sonaba eso!
Pero
esta batalla estaba empezando a estresarme. Estaba preocupado por Firo, pero al
mismo tiempo, también estaba listo para usar el Escudo de la Ira para quemar a
esta chica hasta las cenizas.
"Cristal,
si no te pones en marcha y terminas esto, yo lo terminaré por ti. Pero, podría
llevarme la casa conmigo."
"Sr.
Naofumi, no querrá decir..."
"Eso
es exactamente lo que quiero decir. No sé lo que le hará a Firo, así que será
mejor que la vigilemos".
"¡Haré
mi mejor esfuerzo!" ‒ Chilló Filo.
“¡No
lo hagas!" ‒ gritó Cristal, entendiendo lo que quise decir, ‒
"¡¿Destruirías la casa que Kizuna y yo construimos?”
"¡Si
eso es lo que se necesita para terminar esta pelea! ¡Nuestros ataques no la
están molestando ni un poco!"
¿No
habían estado observando? Había bloqueado todos los ataques que le habíamos
lanzado.
Si
Rishia no tenía cuidado, iba a hacer que la mataran. Y esta chica puede que
tenga ataques que ni yo podría bloquear. Para colmo, Kizuna no servía de nada
en una batalla contra otro humano.
Si
la batalla continuaba, probablemente llamaríamos la atención de las
autoridades, y quizás el castillo enviaría refuerzos.
Todo
el mundo estaba en medio de la ampliación para la batalla de todos modos.
Saltar en una situación como esta no era muy inteligente.
Lo
que sea que pasara, necesitaríamos un ataque lo suficientemente poderoso para
deshacernos de esta estúpida idiota.
O…
"Raphtalia,
¿puedes usar la Espada Ilusoria?"
"Debería
ser capaz de hacerlo, pero estoy segura de que lo notará."
Raphtalia
tenía casi tanto poder de ataque como Firo en el mundo anterior.
Ella
había estado usando muchas habilidades, pero ninguna de ellas había sido lo
suficientemente fuerte como para terminar el combate. ¿Había perdido la
habilidad de usar esos ataques que ella conocía?
"¿Qué
hay de la Espada Ying-Yang, o la Espada Direccional del Cielo? ¿Todavía puedes
usarlos?"
"Sí,
puedo."
"Bien.
Conseguiré algo de tiempo. Corta a esta chica en pedazos."
"Ah...
Muy bien," ‒ dijo Raphtalia, poniendo su espada en posición horizontal y
cargando su poder mágico.
"¡Una
apertura!" ‒ Gritó Yomogi, atacando.
"Eso
no es una apertura, se está preparando para un ataque. Yo me haré cargo hasta
que ella esté lista".
"¡Entonces
tendré que encargarme de ti primero!"
"¿Qué
va a hacer una debilucha como tú?" ‒ Dije con condescendencia, tratando de
irritarla.
La
cara de Yomogi se tornó de color rojo brillante y ella apretó su espada y dijo
‒ “¿Qué has dicho?”
Sí.
Estaba funcionando. Mientras me prestara más atención que a Raphtalia, mi plan
funcionaría. No estaba confiando únicamente en el ataque de Raphtalia. Firo y Cristal
y Kizuna también atacarían.
Sólo
tenía que asegurarme de que los ataques de esta loca no llegaran a ninguno de
mis compañeros. Tendría que provocarla. Necesitaba toda su atención en mí.
Ahí
fue cuando se me ocurrió. Me reí condescendientemente y miré a Yomogi.
"¿Qué
es tan gracioso?"
"¿Eh?
Oh, nada. Estaba pensando en lo estúpido que se veía Kyo. Me hizo reír, eso es
todo."
"¡Cómo
te atreves!"
"¿Cómo
está ese tipo deprimente? Habla muy bien de si mismo, pero si te mandó a que
nos acabaras, debe estar demasiado asustado para venir él mismo. ¿Cómo te pidió
que vinieras tras nosotros? ‘Estoy demasiado asustado. Aiuuudaaameee pol
favvooooor’. ¡Ahahahaha!"
"¡Bastardo!"
¡Funcionó!
Su cara se puso roja de ira, y me miró con odio. En ese momento, ella no quería
nada más que venir tras de mí.
"Naofumi,
seguro que eres bueno en ese tipo de cosas."
"Sí,
Kizuna, pero también es útil" ‒ dijo Raphtalia.
"Sí,
lo sé."
Yo
quería gritar: ‘¡Basta ya de charla!’ Pero no tuve la oportunidad de hacerlo
antes de que Yomogi me clavara su espada y yo la bloqueara con mi escudo. Por
un momento, estuvimos atrapados en nuestro sitio, mi escudo contra su espada,
ninguno de los dos dominando al otro.
De
repente me di cuenta de que nunca había intentado cambiar mi escudo en una
situación así. Era tan buen momento como cualquier otro para intentarlo. Decidí
cambiar a un escudo con un efecto adverso, así que elegí un escudo que había
desbloqueado del monstruo jefe con el que Kizuna había luchado durante la
última batalla de las olas: el Escudo Elefante Demonio.
Por
supuesto, ya lo había nivelado. Cristal y los demás me habían ayudado a reunir
los materiales que necesitaba para subirlo de nivel, así que el proceso se
había acelerado.
Escudo Elefante
Demonio C: Capacidades bloqueadas:
Bonos al Equipar: Defensa
+30, Aumento de Defensa a las Sombra mientras Cabalgas, Aumento de Habilidad
para Manejar un Rickshaw +4, Aumento de Habilidades mientras Transportas
(medio).
Efecto Especial: Colmillo
de Elefante Demonio (crítico)
Mi
serie firorial tenía un ajuste de habilidad mientras cabalgas (alto), así que
para no solapar ese escudo, este escudo ofrecía un aumento de defensa en su
lugar.
No
sabía nada sobre los otros efectos. ¿Se suponía que tenía que tirar de un
rickshaw? ¡No gracias! Podría haber significado que cualquier persona que
llevara conmigo obtendría un aumento de habilidad, pero no iba a cargar a
nadie, así que supongo que nunca lo averiguaré.
¿Debía
llevar a Raphtalia sobre mis hombros en una batalla? ¡Ja!
Estaba
distraído, imaginando lo absurdo por un segundo, pero rápidamente volví a la
batalla que se avecinaba, y acababa de cambiar a un nuevo escudo.
El
nuevo escudo apareció instantáneamente en el lugar del viejo, y mientras la
espada de Yomogi chocaba contra él, el efecto de contraataque, el Colmillo de Elefante
Demonio (crítico) se activó.
“¡¿Qué?!”
El
relieve del colmillo de elefante en el exterior del escudo comenzó a brillar.
Luego disparó una esfera de luz negra a Yomogi.
"¡Ugh!
Pero... Aún no me tienes."
Ella
había estado demasiado cerca para esquivar el ataque, quizás porque su espada
estaba pegada contra mi escudo. El efecto se activó un par de veces más. Las
oscuras esferas de luz se estrellaron contra ella con un poder y un sonido
satisfactorios.
"Ugh..."
Yomogi
intentó clavarme la espada de nuevo, pero falló y se vio forzada a saltar hacia
atrás para conseguir algo de distancia. Respiraba con dificultad, sosteniendo
el hombro que había sido golpeado por las esferas de luz. ¿Había logrado hacer
un daño real?
"Ese
fue un buen truco. Te las arreglaste para hacerme daño."
Parecía
que el Colmillo de Elefante Demonio (crítico) hacía golpes críticos de vez en
cuando.
"¡Hey
Amo! ¡Creo que puedo hacer algo!"
"¡Rafu!"
Raph-chan
y Firo, en su forma de halcón zumbador, se subieron a mis hombros y empezaron a
cantar encantamientos.
"¡Lo
haréé! ¡Raph-chan, hazlo conmigo!"
"¡Rafu!"
¡Cantaban
tan rápido! ¿Qué estaban haciendo?
No
tuve tiempo de preguntarme. Combinaron sus poderes para un nuevo hechizo.
"¡Magia
Conjunta! ¡Molinete!"
Cuando
Firo y Raph-chan lanzaron su hechizo, todas las luces a nuestro alrededor
empezaron a encenderse y apagarse, y entonces la habitación se sumergió en la
oscuridad. La luz era tan cegadora que tuve problemas para ajustar mis ojos.
Luego,
cuatro espadas de viento, como si fueran estrellas, se dispararon a Yomogi
desde todas las direcciones.
"¡Fascinante!
¡Nunca he oído hablar de un ataque así!" ‒ Gritó Yomogi.
¿Se
estaba divirtiendo?
"¡Cristal!
¡Espero que estés lista para ayudarnos aquí!"
“Sí,
lo estoy” ‒ Gritó, abriendo su abanico y bailando en la oscuridad,
desencadenando una vez más la Danza Circular Formación de Ataque: Flor de
Viento. Yomogi apenas podía seguirle el ritmo. Fue forzada a retroceder más.
"Crees
que me tienes, ¿es eso?" ‒ Gritó Yomogi, clavando su espada en el suelo.
¿Iba a usar ese ataque de nuevo?
No,
ella tenía otros planes.
La
decoración en forma de ojo en la empuñadura de su espada abrió su párpado y nos
disparó un rayo de luz. Me apresuré a bloquear el láser antes de que pudiera golpear
a alguien.
"¿Lista?"
"¡Sí,
estoy lista!" ‒ Gritó Raphtalia, saltando desde las sombras y acuchillando
horizontalmente con su katana.
Se
veía muy bien cuando lo hacía, apareciendo desde la oscuridad detrás de Yomogi
y blandiendo su espada así.
"¡Espada
Direccional del Cielo!"
Patrones
circulares de ying-yang aparecieron a su alrededor. El remolino de blanco y
negro se volvió cada vez más intrincado y complejo, y luego las esferas se
dividieron en dos. No me había dado cuenta antes de que había tantos detalles
intrincados. ¿Había cambiado el ataque? ¿O era esto algún tipo de efecto del
arma vasalla?
"¡Ya!"
¿Ha
fallado?
No…
Yomogi usó su espada para bloquear el ataque, llenando el aire a su alrededor
con chispas.
"Ugh...
¡No me voy a rendir tan fácilmente! Si me rindo ahora, ¡nunca podré volver a darle
la cara a Kyo!"
"Ew
¿Por qué querrías hacerlo?"
"¡No
permitiré que insultes a Kyo!"
"¡Sr.
Naofumi!"
Yomogi
había estado a punto de ir a por Raphtalia en represalia, pero mi nuevo insulto
la había molestado tanto que se volvió hacia mí, cortándome con su espada. Por
supuesto, lo bloqueé con mi escudo, pero algo en sus ataques era diferente que
la última vez.
"Oye,
esa espada tuya..."
La
piedra preciosa parecida a un ojo se veía diferente que antes. El ojo estaba
bien abierto. Se veía malvado. No estoy diciendo que tenía las habilidades de
un maestro artesano, pero algo estaba definitivamente mal. Sentí que algo
terrible se avecinaba, que todos estaríamos en serios problemas si no nos
deshacíamos de esa espada tan pronto como fuera posible.
"¡Tu
espada se está volviendo loca! ¡Deshazte de ella!"
"¿Qué?
¿Sugieres que hay defectos en la magistral creación de Kyo?"
Lo
sentí cuando la hoja chocó contra mi escudo. Sentí como un latido. ¿Me lo
estaba imaginando? Lo peor fue que parecía que se estaba acelerando. Más y más
rápido. Era como una cuenta regresiva para una explosión.
"Te
lo estoy diciendo, ¡suelta esa espada!"
No
me importaba lo que le pasara a Yomogi, sólo que no quería quedar atrapado en
una explosión.
“¿Cuán
estúpida crees que soy? ¡¿Bajar mi arma cuando me enfrento a enemigos?!”
Ella
estaba decidida. Se apresuró a correr hacia Raphtalia, lista para dar un golpe
mortal. Pero entonces...
Un
ofuda voló por la habitación y le golpeó la mano. Yomogi y yo miramos hacia
abajo, y luego escaneamos la habitación para ver de dónde vino.
"¡Oh,
no he fallado!"
Sí.
¡Bien hecho, Rishia! ¡Seguro que era una buena tiradora!
“¡¿Qué?!”
El
ofuda se pegó a su mano y estalló en llamas, forzándola a soltar la espada.
Yomogi
chilló, pero era demasiado tarde. Corrí para patearla a través de la
habitación, pero llegué demasiado tarde.
Algo
así como una enredadera se disparó de la espada y se envolvió alrededor del brazo
de Yomogi.
“¿Qué
dem…?” ‒ Gritó conmocionada, aterrorizada, como si no se hubiera dado cuenta de
lo extraña que había sido su arma hasta ese momento.
"Ughhhhhh."
La
enredadera la envolvía con más fuerza alrededor de su muñeca. Parecía que le
estaba chupando algo. ¿Era... sangre? Debe estar robando su poder mágico
también, y quizás incluso envenenándola mientras lo hacía.
Yomogi
me miró con ojos inyectados de sangre, y luego levantó la espada sobre su
cabeza. ‒ "¡Mi cuerpo! ¡Se está moviendo solo!"
Levanté
mi escudo para bloquear el ataque, pero ella bajó la espada con tanta fuerza
que el impacto me hizo deslizarme hacia atrás.
Afortunadamente,
pude mantener el equilibrio, pero si no hubiera tenido suerte, ya estaría tirado
al suelo.
La
brillante luz en la empuñadura de su espada se estaba haciendo más fuerte.
"¡Suéltala!
¡Suelta la espada!"
Al
darse cuenta del peligro, usó su mano libre para tratar de arrancar los dedos
del mango. Pero las enredaderas salieron disparadas y la agarraron aún más fuerte.
"Ugh..."
No
me gustaba el aspecto de esto. Parecía que iba a explotar en cualquier momento.
Preparé
mi escudo para proteger a todos de la explosión. Yo también pensaba en Yomogi,
pero no veía la manera de salvarla de lo que se avecinaba. Lo único que podía
hacer era proteger a mis amigos y tratar de limitar el daño.
"¡Señuelo
de Cebo!"
Kizuna
golpeó la brillante espada con su señuelo y dijo ‒ “¡No te rindas todavía!” ‒
mientras cambiaba su arma al cuchillo de atún y se preparaba para atacar.
"¡Ataque
de Flor de Sangre!"
Ese
era el ataque favorito de Kizuna. No funcionaba contra oponentes humanos, pero
era devastador para un monstruo. Ella envió el ataque volando hacia la espada.
Fue
un ataque poderoso, pero no fue suficiente para destruir la espada, que era más
dura de lo que pensaba. La propia Yomogi estaba ilesa, pero las enredaderas que
tenía alrededor de su brazo habían sido destruidas por el ataque de Kizuna.
Rápidamente soltó la espada.
"¡Sí!
¡Buen golpe!" ‒ Grité, agarrando la espada donde cayó.
Debe
haber decidido que yo era su nuevo objetivo, porque me disparó más de sus
apéndices parecidos a enredaderas.
No
era tan tonto como para caer en eso. No era como Yomogi. ¡No me dejaría dominar
por una especie de espada monstruosa!
"¡Aaarrrggh!"
‒ Retrocedí y lancé la espada con todas mis fuerzas. La envié a través del
agujero en la pared.
"¡Yo
seguiré!" ‒ Gritó Cristal, enviando otra de su Danza Circular Formación de
Ataque: Flor de Viento tras la espada.
Su
ataque golpeó la espada mientras aún estaba en el aire, y se fue volando hacia
el cielo.
Ese
fue un buen golpe. ¿Su ataque tenía capacidad de rastreo?
Finalmente,
la espada explotó en el aire.
"Me
alegro de que nos hayamos deshecho de ella. Habría sido malo si esa cosa
hubiera explotado aquí".
"No
puedo creer que el magistral invento de Kyo tenga un mal funcionamiento como
ese..." ‒ murmuró Yomogi sosteniendo su brazo herido y haciendo una mueca
de dolor.
"Bueno,
ya no tienes un arma, así que, ¿qué piensas hacer ahora? Parece que esa cosa se
las arregló para agotar tus fuerzas antes de que nos deshiciéramos de
ella".
¿Pensó
que simplemente íbamos a dejarla escapar?
"Antes
de que pienses en correr, debo decirte que tenemos al Héroe de la Caza con
nosotros, que es mejor cazadora que nadie. Si quieres huir, adelante. Será la
hora de la cacería."
"Me
haces sonar tan malvada cuando lo dices de esa manera" ‒ dijo Kizuna.
"No
te preocupes, Kizuna. Él simplemente disfruta amenazando a la gente" ‒
dijo Cristal.
Hubiera
sido mejor que no comentara, pero ella tampoco estaba exactamente equivocada.
"Ahh...
bueno, dejemos eso en manos del Sr. Naofumi, ¿de acuerdo?"
"Rafu".
“Esa
fue una gran explosión. ¡Oh mira! La luz está regresando al Amo”.
La
luz de las explosiones cayó como la nieve, cayendo lentamente hacia mí. ¿Qué
significaba?
"Entonces,
¿qué sigue?"
Será
mejor que empecemos por castigar a esta loca que vino a matarnos en medio de la
noche. Podríamos atarla y torturarla para obtener información. Parecía que simplemente
nos diría la verdad realmente.
"Ugh...
¡Mátame!" ‒ Gritó Yomogi, levantando las manos en el aire.
"Bien,
dejaremos que ese viejo grasiento te cuide. Raphtalia, ¿no había un monstruo
que parecía un cerdo semi-humano por aquí? Creo que su nombre era Oak."
"Sobreviviré
a cualquier tortura que se te ocurra" ‒ ladró.
"Heh.
No pienses que vas a salir de ésta de una pieza".
"¿Cómo
se te ocurren estas cosas?"
"Naofumi,
tienes todo esto de tus días de otaku, ¿no? Particularmente de las cosas de
'adultos'" ‒ Kizuna me miró de
reojo. Pero, ¿no era obvio?
Además,
en realidad sonaba como algo que Eclair hubiera dicho, como algo que le diría a
un prisionero.
"De
todos modos, tu nombre es Yomogi, ¿verdad? Bueno Yomogi, vamos a atarte
ahora."
Y
así logramos capturar viva a la asesina de medianoche de Kyo.