Traductor: Lord
Editor: Lord
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Bandidos de Dédalos
Ladrones,
bandidos, piratas... tienen muchos nombres, pero había un periodo de tiempo
durante el cual estos ‘rebeldes’ atacaban a gente inocente y saqueaban vidas y
dinero sin cesar.
Eso
era justo después de las guerras.
La
transformación de los restos del ejército perdedor en rebeldes. Eso era algo
que ocurre como si fuera natural tanto en el Continente Pandora como en el
Continente Arc.
El
tiempo se remonta al séptimo día del mes del Trueno Distante, en las Colinas de
Goldran, donde tuvo lugar una gran guerra.
El
ejército de humanos llamado Cruzados que vino del otro lado del mar derrotó al
ejército de Dédalos liderado por el Rey Dragón Negro.
Y
los restos del destruido ejército de Dédalos...
“Esa
molesta raza demoníaca, así que finalmente muestran su verdadera personalidad
malvada”
...
Ahora se había convertido en bandidos que se desbordaban libremente en el
territorio de Dédalos, ahora controlado por los humanos de la República de
Syncrea.
“¡Ese
joven Liuchrome es muy poco entusiasta, los soldados y la gente que son
demonios son demonios, porque no se deshizo de ellos que ahora todo acabó así!”
La
persona que se quejaba mientras respiraba pesadamente era el Conde Belgunt, el
jefe de la facción noble de los Cruzados y también el hombre con la
responsabilidad de conquistar Spada.
Sus
ojos eran verdes debido al color de la energía mágica del viento, pero ahora
mismo podría parecer rojo debido a su ira.
Él
estaba en la flor de la vida, pero su cuerpo alto no mostraba ningún signo de
envejecimiento, sino que llevaba una armadura ligera cubierta con hermosos ornamentos
de plata, que también daba una alta resistencia mágica, de ahí que la armadura
ha fusionado la belleza y la valentía de un noble en uno.
En
su cintura estaba colgando un Estoque de Mithril personal hecho a medida, y en
su espalda había un arco largo verde oscuro que podía aprovechar al máximo el
atributo del viento.
La
razón por la que estaba completamente armado no era porque quería ir a cazar
demonios para calmar su ira, sino porque no tenía otra opción que subyugar a
los rebeldes demonios que se amotinaban.
Este
lugar era el Pueblo Alsace... no, ahora este lugar era un fuerte llamado
Fortaleza Alsace, sería el punto de base de primera línea cuando atacara Spada,
al mismo tiempo que sería la defensa para proteger la República de Dédalos.
Fue
sólo el otro día cuando el Conde Belgunt se enteró de que en esta Fortaleza
Alsace había un gran número de demonios apareciendo en grandes cantidades,
donde los soldados estaban siendo entrenados y otros preparativos de guerra se
hacían bajo el control del Conde.
El
grupo estaba mezclado con bestias, orcos, lagartos y otras razas, todos
vestidos con armaduras negras. Además, sus movimientos no eran de novatos, sino
de veteranos de guerra.
Incluso
los campesinos normales entenderían que esos rebeldes eran los restos del Ejército
de Dédalos.
Como
un bono recientemente, no, después de la lucha en Goldran, pero después de que
el Mes Platino comenzó, los movimientos de estos antiguos soldados de Dédalos
han aumentado.
También
ha habido rumores de que los restos del ejército podrían estar esparcidos aquí
y allá en territorio de Dédalos y podrían estar planeando recuperar la capital.
Sea
cual fuere la autenticidad de dichos rumores, era verdad que los bandidos
estaban siendo desenfrenados, este era un grave problema para los Cruzados, más
aún para Belgunt, que iba a iniciar una guerra contra Spada en un futuro
cercano.
Si
surgieran conflictos internos entonces no tendrían espacio para atacar a otros
países, aunque no llegara a eso, rompería el apoyo logístico y aumentaría el
peligro.
Si
se hace un repaso a la historia militar del Continente Arc, se podrían
encontrar numerosos casos similares.
Él
quería comenzar el ataque para el mes que viene, pero con los bandidos
enfurecidos dentro no podría iniciar la guerra aunque nosotros/él quisiera,
sería mejor cortar primero la fuente de ansiedad.
Por
eso se quejaba del verdadero comandante de los Cruzados y también del
responsable del mantenimiento del orden público de Dédalos.
“¿Qué
hay de la situación?”
Salió
de la Fortaleza Alsalce, montado sobre el ya preparado caballo de color gris
dorado, y le preguntó a su subordinado.
“No
ha habido nueva información, se cree que los rebeldes siguen estando en el
Pueblo Kwarl”
Un
soldado que llevaba casco de acero y un abrigo mejor que los soldados normales
respondió con fluidez.
“Había
una muro en el Pueblo Kwarl, ¿verdad? Argh, es un lugar tan tedioso...”
Si
pensaba en el número de soldados que poseía, entonces era fácil tomar el
control del grupo de bandidos.
Sin
embargo, no quería agotar a sus soldados por un trabajo inútil, y sobre todo,
había habido un precedente abominable en esta tierra de Alsace sobre la que
estaba parado.
“No,
es por eso que, aunque siendo demonios miserables, tienen inteligencia... y
también existe el rumor acerca de recapturar la capital, este podría ser un
eslabón de la misma”
En
cualquier caso, él debe atacar el Pueblo Kwarl y deshacerse de los bandidos lo antes
posible.
Después
de terminar los preparativos de salida, Belgunt se puso delante de sus mejores
tropas y empezó a pensar en el plan para capturar la aldea protegida por un
muro.
Aunque
se fuera ahora mismo, no sería hasta pasado mañana que llegará al Pueblo Kwarl.
En
los ojos de Belgunt mirando al claro cielo con el sol casi cruzando el
meridiano, se reflejaba la figura de una persona.
“Hmm.
Esto es...”
Los
ojos de Belgunt estaban realzados por la magia para tener siempre una visión
aguda, por lo que pudo notar la existencia de esa persona más rápido que los
demás.
Sin
embargo, la persona con el sol como telón de fondo volaba a una velocidad
bastante alta sin ningún impedimento, muy pronto sus subordinados también se
dieron cuenta.
Y
alrededor del momento en que los soldados se estaban poniendo ruidosos sobre
esa persona que volaba hacia ellos, los ojos de Belgunt ya confirmaron quién
era realmente.
“¡¿7º
Apóstol... Lord Sariel!?”
Un
poco más tarde, una joven muchacha que montaba a caballo sobre un Pegaso blanco
puro bajó del cielo.
Él
era un Conde y el comandante supremo de los soldados reunidos aquí, pero no
pudieron parar a la chica apareciendo delante de él sin dudarlo.
Había
lugar para la duda de quienes tenían el estatus más elevado entre un Apóstol
que tenía una existencia más cercana a Dios o un Conde que controlaba a los
humanos.
No
teniendo la verdad con esta belleza sin igual que emitía un aura blanca ante
sus ojos, todos los soldados sólo podían contemplarla estupefactos.
“Disculpe
la visita repentina, Conde Belgunt.”
El
7º Apóstol Sariel, aterrizó tranquilamente en el suelo con su Pegaso y
alrededor del tiempo en que ella dijo esas palabras, el Conde Belgunt ya estaba
bajando de su caballo y estaba postrándose.
“No,
lo sentimos por no darle una bienvenida apropiada a usted Lord Sariel, pero en
este momento estábamos a punto de partir para deshacernos de los bandidos
demonios...”
La
inspección de la Fortaleza Alsace se llevó a cabo recientemente, así que por
qué razón había venido aquí de repente es algo que no sabía. Belgunt empezó a
pensar cosas malas sobre su visita en ese momento.
Sin
embargo, como si dijera que Dios no toma nota de los problemas de una persona
normal, Sariel contestó en su habitual voz plana.
“Ya
he liberado el Pueblo Kwarl”
Sacó
un fajo atado a la silla de montar del Pegaso y se lo dio a Belgunt.
Esta
escena podría parecer una escena divina en la que una bella chica da el regalo
de Dios a un noble en esplendorosa armadura, sin embargo la parte inferior de
la tela blanca estaba manchada con un color rojo oscuro como si violara la
divinidad de la tela.
“Esto
es...”
Belgunt
ya había adivinado lo que era debido a su instinto, pero al darse cuenta de que
dio en el blanco, inesperadamente emitió una voz de sorpresa.
“El
jefe de los bandidos”
Él
lo desenvolvió y había un rostro de ogro con expresión de ira y los ojos
abiertos de par en par.
Belgunt
había experimentado muchas guerras, pero al ver la cabeza recién cortada del
Orco pareciendo convertirse en un No-muerto y moverse por sí solo, surgió un
sudor desagradable.
Sin
embargo, Belgunt no se sorprendió sólo por el alcance de mirar fijamente en
trance, y comprendió inmediatamente el significado que esto tenía.
En
resumen, el 7º Apóstol Sariel irrumpió en el Pueblo Kwarl sola y los aniquiló.
Además,
podría haber ocurrido esta mañana.
“Perdón
por hacer que Lord Sariel se moleste con este trabajo”
“No
fue difícil”
Contestó
Sariel sin vacilación en sus profundos ojos carmesí.
Como
ella dijo, Sariel podría no haber tenido ningún problema para enfrentarse a los
bandidos.
Para
ella, cortar la cabeza de un brutal Orco y firmar documentos son lo mismo, en
otras palabras, sólo un trabajo muy aburrido.
Belgunt
era también una persona de la República, había oído las leyendas de los
Apóstoles desde la niñez, y, después de convertirse en adulto, todavía oye
hablar de sus nuevas hazañas.
Sin
embargo, después de ver un fragmento de ese abrumador valor, sintió una
indescriptible admiración y una sensación de vacío.
“Muchas
gracias, tampoco queríamos malgastar a nuestros soldados antes de invadir
Spada. Quiero agradecer a Lord Sariel por su trabajo...”
“Por
favor, no se preocupe por eso”
No
había nada detrás de sus palabras, pero Sariel verdaderamente sentía que no
había necesidad de ello.
“Después
de todo, mi misión es tratar con todos los bandidos esparcidos en el territorio
de Dédalos tan pronto como sea posible”
Al
parecer, el arzobispo Liuchrome parecía haber estado haciendo uso del poder de
Sariel en vez de mantenerla en un sólo lugar como un falso comandante general.
La
misma persona, con la reputación de 7º Apóstol, estaba completando la misión
rápidamente.
Como
si dijera que el trabajo estaba hecho, Sariel se dio la vuelta y se puso de
nuevo a horcajadas sobre el Pegaso.
Con
eso muchos pensaron que se iría volando, pero...
“También
deseo que la invasión de Spada suceda rápido, Conde Belgunt, que la divina
protección de Dios esté con ustedes”
Inesperadamente,
ella dio palabras de bendición. El Conde Belgunt levantó la cabeza y se inclinó
para despedirla.
Sin
embargo, para entonces, Sariel no estaba en ninguna parte.
El
Conde Belgunt les dijo a sus subordinados que miraban hacia el horizonte como
él.
“Todos,
¿han oído las palabras de antes? Lord Sariel espera cosas buenas de nosotros,
así que necesitamos trabajar más duro para comenzar la invasión de Spada lo
antes posible”
Un
segundo más tarde, la Fortaleza Alsace se llenó de vítores como si trataran de
destrozar toda la fortaleza.
Aunque
también eran Cruzados, eran soldados de nobles, comparados con los soldados de
la Iglesia, su piedad era baja.
Sin
embargo, no había ningún hombre en la República que no se animara al recibir
palabras de motivación de una bella Apóstol de Dios.
Lo
mismo sucedía con Belgunt, que dirigía el ejército por diversos motivos.
En
la actualidad, olvidó todos sus intereses y se alegró desde el fondo de su
corazón con un fuerte sentido del deber para completar el santo deseo de Dios.
NOTAS
DEL AUTOR
El
arco 15 termina con este capítulo.
Ha
pasado un tiempo desde el último turno de Sariel. Parece que está haciendo bien
su trabajo.
16
de julio de 2012
El
resultado de Dengeki Bunko fue que no tuve suficiente destreza para escribir y
fallé en las elecciones primarias. Lo siento por esta triste notificación.
Por
lo tanto, estoy pensando en publicar esta obra derrotada sobre 'Hagámonos
novelistas'. El título es ‘Mundo de Pesadilla’.
Lo
publicaré en varios turnos a partir de hoy. Aunque falló, no me aflojé, y es un
trabajo que escribí seriamente. Si te gusta, por favor léelo junto con Kuro no
Maou.
Oh,
y la heroína es una Yandere.
Bueno,
entonces, por favor esperen con impaciencia.
NOTA
DE LORD:
Me
pregunto si alguien ha llegado a traducir Nightmare World siquiera al inglés.
Según el traductor japonés-inglés es una obra corta de sólo unos 40 capítulos
ya terminada.