Traductor: Lord
Editor: Lord
13 Separación de Caminos
Volvimos
al barco fantasma donde luchamos contra el Devorador de Almas. Quizás porque el
enemigo había sido derrotado, el barco estaba tendido de costado en tierra. Los
héroes y sus equipos también estaban allí, inconscientes.
Los
soldados voluntarios y los aldeanos estaban a su alrededor, aparentemente los
habían estado protegiendo. No deberían haber tenido que hacer eso.
Finalmente,
llegó el momento de la mejor parte de todo este desastre: añadir los materiales
al repertorio de mi escudo. Desafortunadamente, los Goblins de Asalto Sombrío y
los Hombres Lagarto Sombrío eran sólo eso, sombras. Por lo tanto, no quedaban
materiales que pudiera absorber. Bueno, había un pequeño montón de material
sombrío, pero sólo pude desbloquear un nuevo escudo con él.
Escudo Sombra: capacidad
bloqueada:
Bonos al equipar:
resistencia a las sombras (pequeño)
Había
algunas otras cosas, pero sólo desbloqueaban aumentos de estatus, así que los
ignoraré por ahora.
Todo
lo que quedaba era el Devorador de Almas Ínterdimensional.
"Oooh.
¡Delicioso!"
"No
te lo comas".
Firo
lo había agarrado y estaba a punto de metérselo en la boca cuando la detuve.
Estaba claro qué había causado que se volviera loca y violenta. De cualquier
manera, debe haber sido porque se comió el núcleo del dragón.
"¡Vamos!"
Alargué
la mano y cogí el material de Firo, pero por alguna razón pasó instantáneamente
a través de mis dedos y cayó al suelo.
"¿Cómo
lo agarraste?"
"Usé
magia de viento en mis manos."
"¿En
serio?"
¿Así
que no puedes sostener el pez en tus propias manos? Eso era raro.
"¿Está
todo bien?"
Los
soldados voluntarios vieron la cara confusa que estaba haciendo y vinieron a
ayudar.
"Oh,
sí. Le estaba preguntando a Firo cómo pudo sostener al monstruo este."
"Estos
monstruos no tienen cuerpos físicos. Para controlarlos necesitas usar algo que
tenga propiedades mágicas".
"¿Qué?"
"Es
bastante conocido. ¿No lo sabías, Héroe del Escudo?"
"No."
"Los
monstruos sin cuerpo físico son muy raros, así que probablemente nunca te hayas
topado con uno."
“¿Alguno
de ustedes tiene un arma con propiedades mágicas que pueda usar? Me gustaría
descuartizar esta cosa.”
El
soldado recorrió el grupo preguntando si alguien tenía un arma como ésa, y
encontró a una persona cuya arma tenía algún material mágico barato. Me lo
prestaron y descuarticé a los peces.
Firo
me contó cómo había puesto la magia en sus manos y yo la copié. Recogí la cola
y dejé que el escudo la absorbiera.
Escudo Devorador de
Almas: capacidad bloqueada:
Bonos al equipar:
habilidad ‘Segundo Escudo’ resistencia espiritual (medio): Resistencia al
Ataque Espiritual (medio): Aumento de SP:
Efecto Especial: Devorar
Alma, recuperación de SP (débil)
El
escudo se desbloqueó con sólo la cola, y no hacía referencia a ninguna otra
parte, lo que probablemente significaba que no me serviría de nada seguir diseccionando
al Devorador de Almas. Intenté dejando que el escudo absorbiera otras partes,
pero nada cambió.
¿Pero
qué era lo del Segundo Escudo? La Resistencia Espiritual probablemente
significaba que yo podía resistir los ataques espirituales.
El
efecto especial Devorar Almas sonaba interesante. Espero que no significara que
podía comer almas. Eso no me parecía muy bien.
Cambié
lentamente la forma del escudo. Era como si todo estuviera hecho del monstruo,
de la cabeza del Devorador de Almas. Era un diseño extraño.
Y
el Escudo Víbora Quimera tenía un mayor índice de defensa.
Si
el efecto especial de Devorar Almas significaba que yo podía comer almas,
entonces yo debería ser capaz de sostener al Devorador de Almas. Así que
intenté agarrarlo. Pero mis dedos no fueron capaces de tocar su carne.
Supongo
que me equivoqué. Bien. No me interesaba comerme ninguna alma.
Probablemente
era un contraataque de algún tipo. Tal vez se ‘comía el alma del enemigo’ en el
sentido de que absorbía su SP.
Bien,
¿qué era esta habilidad del Segundo Escudo? Lo probé.
"Segundo
Escudo".
De Escudo Antiaéreo
a Segundo Escudo.
Eso
es lo que el icono parpadeando en mi campo de visión decía.
"Escudo
Antiaéreo".
Esperé
para asegurarme de que el Escudo Antiaéreo apareciera en el aire antes de
continuar.
"¡Segundo
Escudo!"
Apareció
otro escudo.
Así
que eso es lo que significaba. Hasta ahora sólo podía usar un Escudo Antiaéreo
a la vez. Pero ahora aparentemente podría convocar dos. Probablemente había
muchas maneras diferentes de usarlo, pero no me emocionaba mucho.
Miré
hacia atrás a los restantes Devoradores de Almas Ínterdimensionales.
Quiero
absorberlos a todos y no dejar nada para los demás. Pero nunca me dejarían
vivir así.
Además,
si no se hicieran más fuertes no sería bueno para nadie, mucho menos para mí.
Si iba a tener que luchar junto a ellos, tendrían que ser fuertes también.
Claro, en esta pelea yo era definitivamente el JMV. Aun así, decidí dejarles
material a los demás.
"Amo,
¡déjame comer las sobras!"
Firo
gritó, un largo rastro de saliva colgaba de su pico.
"No
puedo luchar contra la naturaleza".
Corté
la columna vertebral y le lancé una cola a Firo. Se lo tragó.
"¡Los
huesos eran como los slimes!"
"Espera.
¿Nos topamos con algún slime?"
"Um..."
El
resto de la conversación no fue interesante, así que la cortaré ahí. Digamos
que terminé enojado porque no pude usarlos para desbloquear ningún escudo.
"¡Muy
bien! Vayamos al próximo pueblo y veamos si podemos ayudarlos a
reconstruir."
Habíamos
terminado lo que habíamos venido a hacer. Así que los soldados voluntarios y yo
empezamos a ayudar con la limpieza de los cuerpos y las reparaciones en el
pueblo.
Obviamente
no íbamos a poder ayudar con todos los trabajos que necesitábamos hacer, así
que nos enfocamos en alimentar a los sobrevivientes y tratar sus heridas.
"¡Muchas
gracias! ¡Haremos todo lo que podamos!"
Los
soldados voluntarios escucharon mis órdenes y las obedecieron sin problema.
Supongo que significaba que ya no necesitaba dudar de su sinceridad.
Había
pasado un día desde nuestra larga e intensa batalla, y finalmente llegaron los
caballeros.
El
líder de los caballeros estaba muy molesto porque había convocado a los
soldados voluntarios a la ola conmigo.
"¡Bastardo!
¿Crees que puedes robar a mis subordinados y usarlos para formar un ejército
privado?".
“¡No
es culpa del Héroe! Vinimos a él y le ofrecimos prestarle servicios. Simplemente
aceptó nuestra oferta”.
"¿Qué?
¿Y se llaman a sí mismos soldados de la gran tierra de Melromarc? ¡¿Se
venderían al Escudo?!"
"Idiota.
¿Realmente te vas a enfocar en regañar a tus subordinados cuando estés rodeado
por toda esta tragedia? ¿Tienes idea de lo malos que habrían sido los daños si ellos
no hubieran estado aquí?".
Los
aldeanos se habían reunido para escuchar lo que estaba pasando. Todos
asintieron de acuerdo conmigo.
"Y
para que lo sepas, esos otros héroes de los que dependes tanto, fueron
derrotados junto con sus equipos durante la ola, y ahora se están relajando en
ese edificio".
Nadie
les había pedido que lo hicieran, pero los aldeanos se habían reunido y habían llevado
a los héroes inconscientes de vuelta a la ciudad para que pudieran cuidarlos
hasta que recuperaran la salud. Ellos tenían la medicina que necesitaban, pero
aún faltan unos días para que se recuperen. Sin embargo, se estaban recuperando
rápidamente y probablemente se despertarían antes de que terminara el día.
"¡Apúrense
y tráiganme a los Héroes! Los enviaré a un excelente hospital".
"Sus
heridas no son tan malas como las de los demás por aquí. Hay aldeanos en peores
condiciones. ¡Deberías darles prioridad!"
“Debemos
dar prioridad a los Héroes por el bien de nuestro gran país. ¡No, por el
mundo!”
Este
tipo estaba deslumbrado consigo mismo.
A
pesar de todo, yo había asumido que se comportarían de esa manera, así que
habíamos estado dando prioridad al tratamiento de los aldeanos.
"Sí,
sí, sí. ¡De todos modos, apúrate y sácalos de aquí! El resto de nosotros
tenemos cosas que hacer".
"Espera,
Escudo".
Les
hice un gesto con la mano, pero los caballeros habían estado hablando de la
situación con los soldados voluntarios, y ahora me llamaban.
"¿Qué
pasa ahora?"
"Se
requiere tu presencia en el castillo."
"No,
gracias. Eres un fastidio".
"Vendrás
con nosotros."
Me
gustaría ver que intenten obligarme. Teníamos asuntos más importantes que
atender. ¿Por qué siempre estaban en mi camino?
Los
ignoré y me volví para irme, pero los soldados voluntarios se adelantaron, rogando.
Se inclinaron ante mí.
"Por
favor, Héroe del Escudo. Por favor, venga con nosotros."
Habían
hecho todo lo que les pedí y obedecieron todas mis órdenes. No parecía correcto
ignorarlos ahora. Además, tenía ese carruaje nuevo que necesitaba recoger del
tipo de la armería.
"Rayos."
Me
rasqué la cabeza y lentamente me di vuelta.
"Bien.
Todo lo que tengo que hacer es ir con ustedes, ¿verdad? Se lo debo a estos
soldados, así que esa es la única razón por la que lo haré".
"¡Muchas
gracias!"
Todos
estaban claramente agradecidos de que yo iba a ir con ellos. Lentamente asentí.
Así que todos fuimos al castillo.
***
Llegamos
al día siguiente y entramos en el castillo.
"Nos
gustaría que sus compañeros esperaran en la otra habitación."
"¿Nos
traes hasta aquí y luego las dejas fuera?"
Esta
gente me volvía loco.
"¿Te
importa si simplemente me voy de aquí?"
No
era como si fueran a hacer algo bueno por mí. Todo esto era una pérdida de
tiempo.
"No
puedes irte. Tenemos mucha información que necesitamos saber de ti."
"Te
dije todo en el camino hacia aquí."
Ya
les había contado cómo los héroes fueron derrotados y nos dejaron solos para
enfrentarnos al último enemigo. Los soldados voluntarios lo habían visto todo,
aunque desde lejos, así que no había lugar para que dudaran de lo que yo decía.
Basura
podría tratar de inventar algo, pero si lo hiciera, simplemente me iría
corriendo.
Yo
era lo suficientemente fuerte como para escapar ahora, y si Raphtalia y Firo
estaban conmigo, entonces debería ser capaz de superar a cualquiera que
intentara perseguirnos.
"¡Silencio!
¡Están ante el rey!"
Las
bisagras de la puerta chillaron mientras la puerta se abría, y fuimos
conducidos a los tronos, donde Basura estaba sentado y nos miraba severamente.
Estoy
seguro de que ya le habían dicho todo. Obviamente estaba irritado por lo
exitoso que yo había sido durante la ola.
“Es
increíble pensarlo, pero oí que fuiste capaz de luchar contra la ola, Escudo.
En cuanto a mí, no creo ni una palabra”.
"¿Así
es como expresas tu gratitud?"
"¡Insolencia!
Tengo una pregunta para ti... no puedo confiar en tus palabras."
"¿Qué?"
¿Qué
tan horrible era este tipo? ¿Necesitaba indicar su desconfianza después de cada
frase que decía?
“Escudo,
he oído que has descubierto una fuerza que te ha hecho más poderoso que los
otros héroes. No lo creo, pero tienes la obligación de decirme si es verdad. Habla
ahora. No es como si fuera a creerte”.
Era
tan transparente, el tonto. Se preguntaba si yo era más fuerte que los otros
héroes, pero no era lo suficientemente honesto como para preguntármelo directamente.
Me puso enfermo, Basura.
Sin
embargo, honestamente, no tenía ni idea de por qué Cristal se retiró después de
derrotar a los otros héroes.
Se
equivocó al pensar que yo era el héroe más fuerte, así que empezamos a luchar.
Pero entonces apareció un contador que indicaba un límite de tiempo, y ella se
retiró.
Pude
decir que el reloj de arena tenía algo que ver con lo que pasó, pero el resto era
un misterio. ¿Qué habría pasado si el contador se hubiera agotado?
Quedaban
demasiadas preguntas. Eventualmente tendríamos que encontrar las respuestas.
Pero no tenía tiempo para eso ahora.
Pero
aun así. Podría decir lo que estaba pasando aquí. Me volví hacia Basura y
sonreí, señalando mi dedo contra el suelo ante mí.
"Si
realmente quieres saberlo, baja hasta aquí e inclínate ante mí."
El
Rey Basura estaba tan sorprendido que se congeló por un momento. Su cara era
graciosísima. Ojalá hubiera podido tomar una foto.
“¿Tartamudee?
¿Tienes los oídos tapados? Si realmente quieres saberlo, baja aquí y pon tu
nariz en el suelo”.
"Uh...
Uh... Uh..."
“¿Por
qué gruñes como un mono? ¿O sólo aspiras a ser tan sabio como un mono? ¡El rey
es basura! No es que me crea las palabras de un mono”.
Mientras
yo parodiaba y me burlaba de él, su cara se puso roja y rígida. Sus ojos me
miraban, llenos de odio. ¿Sabes qué? Me sentí genial.
"¡Bastardo!"
Basura
rugió. Su grito resonó por los pasillos.
El
primer enemigo era la ola, y el segundo era Basura. Pero no iba a perder contra
Basura.
"¡No
vuelvas a aparecer por aquí nunca más!"
“¡Tú
fuiste quien me pidió que viniera! ¡No tienes que pedirme que me aleje!”
Así
que le di mi despedida final a Basura.